Comunicación presentada al II Congreso Ciudades Inteligentes:
Autor
- Jaume Batlle, Gerente Negocio Smart, Doxa Innova&Smart
Resumen
Nuevos modelos de negocio, emprendedores, economía de km. cero, etc. Estos son algunos de los términos que usamos cuando hablamos de economía dentro del paradigma smart y centramos esa economía en el entorno local, el más cercano a los ciudadanos, la real. Entendemos que todos los productores de servicios y bienes, y los consumidores de los mismos son el estándar, los habituales, los que tienen la posibilidad de acceso y el conocimiento necesario para sacar el máximo provecho de todas estas innovaciones. ¿Pero nos estamos dejando algo? En esta comunicación intentaremos ampliar el abanico de esos productores y consumidores, que acostumbran a convertirse en prosumers (Alvin Toffler, “Riqueza revolucionaria”, 2006), ver el papel de las TIC a través de las monedas locales y como la innovación social puede ser una palanca de dinamización de la economía.
Palabras clave
Economía, Social, Smart, Innovación, Smart, TIC, Prosumer, Digizens
Introducción
El objetivo último de las ciudades inteligentes es mejorar la calidad de vida de sus habitantes. Este objetivo debe incluir a todos los ciudadanos y poner un énfasis mayor en aquellos que se encuentran con necesidades específicas o en riesgo de exclusión social.
A través de la sinergia entre innovación social y dinamización económica se genera la smart social economy, una estrategia para fomentar inclusión de los sectores más desfavorecidos y promover comportamientos socialmente comprometidos a la vez que se potencia la economía local.
La tecnología y la innovación son facilitadores de estas estrategias a través de proyectos tan variados como la creación de monedas locales, cadenas digitales de buenas acciones o ateneos de fabricación.
El centro de las Smart Cities: ¿Está bien enfocado?
El concepto de ciudad inteligente circula alrededor de 3 ejes: económico, social y medioambiental. Estos tres ejes no se deben desarrollar en separado, sino dentro de una visión holística y estratégica.
Pero, ¿con que foco? Al impulsar un proyecto de Ciudad Inteligente se ha de ser capaz que el ciudadano lo entienda, participe y sobretodo que lo perciba como una mejora para él y su comunidad. Si queremos realmente impulsar una economía con espíritu social, impactar en la economía real que viven a diario las personas, tenemos que enfocar muy bien el centro de nuestras actuaciones, en este aspecto y en todos. Por supuesto, esto no implica desatender otros retos más macro, como son la proyección internacional o la creación de una política industrial alineadas con nuestra estrategia, con nuestra visión de futuro de la ciudad. Todo cuenta y todo suma.
Aquí, entre otros conceptos como los de prosumers, es donde cobra importancia los Digizens (Pablo Sánchez Chillón,2013), los Smart Citizens, los Sensors Citizens (el ciudadano como un sensor activo), en definitiva el ciudadano como parte activa de las Ciudades Inteligentes y como agentes de cambio en este nuevo paradigma.
Se tiene que hacer participar a los ciudadanos, ya sea con técnicas como los Serious Games, la Gamificación y otros que promuevan su interacción en todo este proceso.
El nuevo gran reto con el que nos enfrentamos hoy en día es conseguir el citizen engagement.
Y aquí nos encontramos con ciertas barreras: acceso a las nuevas tecnologías, la percepción antes citada de los beneficios, el lenguaje utilizado, etc
Y son estas barreras son especialmente fuertes y difíciles de vencer, sobretodo en los sectores de nuestras comunidades máas desfavorecidos y que están en riesgo de exclusión social. ¿Es la smart social economy la solución para estos sectores? No del todo, pero puede ayudar.
Las monedas locales: herramientas de dinamización y ordenación
El uso de una moneda local fomenta comportamientos más sostenibles, cívicos y socialmente comprometidos a la vez que se dinamiza/se potencia la economía local.
De monedas locales hay de muchos tipos (RTVE, “Monedas de Cambio”, 2013), tanto en su temática, en su diseño, en sus objetivos y en su distribución territorial (tanto nacional como internacional).
Por citar algunos ejemplos:
- Boniato, Madrid
- Jaras, Aljarafe
- Turuta, Vilanova i la Geltrú
- Pita, Almería
- Puma, Sevilla
- Málaga Común, Málaga
- Bristol Pound, Bristol (Bristol Pound, 2016)
- Sol Violette, Toulouse (Sol Violette, 2016)
El uso de estas monedas, a la vez que sirve como medio de pago, fomenta comportamientos más sostenibles, cívicos y socialmente comprometidos a la vez que dinamiza y potencia la economía local.
Como veremos más adelante (caso de Santa Coloma de Gramenet), es un elemento que incide directamente en la dinamización de aquellos entornos en los que se usa y que, con una buena política de definición y uso, dinamiza el comercio local en ciudades medianas y pequeñas con grandes entornos urbanos potentes cercanos, minimizando el efecto fuga o atracción de los mismos.
La aplicación de estas monedas en entornos económicos colaborativos, como pueden ser mercados de segunda mano, es un elemento de ordenación de las transacciones comerciales que se realizan, posibilitando mecanismos que van más allá del tradicional trueque.
Elementos comunes
¿Qué tiene en común todas estas monedas? Normalmente están asociadas a dos conceptos:
- Dinamización económica: impulsan y alientan a crear nuevas actividades económicas
- Compromiso social: los beneficios de las mismas suelen tener un plus de retorno social a sus usuarios y al entorno inmediato en que se implantan
Por lo tanto, estamos hablando de un efecto dinamizador de la economía local, un impulso de nuevas actividades e iniciativas sociales, y una ordenación en el flujo de “moneda” en los mercados donde tradicionalmente este aspecto ni se cubría ni se le daba importancia. Por lo tanto, no podía servir como un elemento potenciador de los mismos. Se tiene que poder asociar normalmente las palabras “social”, “solidario”, “responsable” con “sostenible”, “moneda”,” transacciones”, “mercado”, “flujo monetario”, etc.
Impulso municipal
Hay casos en que la moneda local se impulsa desde la propia administración. Este es el ejemplo de la Bristol Pound y la nueva moneda local de Santa Coloma de Gramenet (Santa Coloma de Gramenet, 2016), en el que incluso se propone a los funcionarios públicos el pago de parte de su nómina en esta moneda, el pago de las subvenciones a entidades, subvenciones a los comercios que la acepten, con el fin de incentivar el uso de la misma en los comercios de la propia ciudad.
Este impulso municipal alienta también a que muchos comercios se animen, por la confianza que da la institución pública, a adherirse a la red de la moneda, pudiendo pagar parte de sus impuestos locales tanto los propios comercios como los ciudadanos.
Cabe destacar de la experiencia de Santa Coloma de Gramenet dos aspectos:
- El proyecto ha sido financiado por el programa Digipay4Growth (Digipay4growth, 2016), en el marco de un CIP (Competitiveness and Innovation Framework Program) de la UE
- El uso de la metodología de medición de impacto local, la LM3 (LM3, 2016), es una herramienta que permite medir el impacto económico local que la New Economics Foundation (NEF) desarrollo con el soporte de la Countryside Agency del Reino Unido durante el período 2000–2004. La finalidad principal de la LM3 es la de poner de relieve los flujos de dinero y la manera como la administración, mediante un cambio de organización, pueden mejorar el impacto en la economía local.
Uso inteligente de las TIC
Como ya se ha dicho anteriormente, existen diferentes diseños de monedas, y las que más sobresalen y están teniendo más éxito son las que incorporan las TIC en el mismo.
Los más avanzados son los casos de Bristol Pound y Sol Violette, donde el uso de las TIC con plataformas completas de gestión, permiten realizar desde todos los procedimientos asociados a la gestión propia de la moneda, hasta el pago de impuestos locales.
Aunque también existen casos en nuestro país de la aplicación de las TIC, como son los casos de los Boniatos (Madrid), donde también cuentan con una plataforma TIC que les permite cubrir todo el ciclo de vida de la gestión de la moneda virtual.
Por tanto, existe el convencimiento del efecto potenciador de las TIC y el impacto multiplicador que su adopción confiere a las monedas virtuales.
Innovación social, ¿una palanca?
La innovación social, como palanca para rehacer la cohesión en los barrios,crear economía colaborativa y fomentar un sociedad más comprometida, se está convirtiendo en una palanca para el impulso de la smart social economy.
Esta innovación social debe partir de una estrategia y de un método concreto, preciso, y serio. Esta seriedad en la innovación no impide la entropía necesaria para la creación de la misma, el libre albedrio de las ideas, y la creatividad.
Un ejemplo: Ateneos de Fabricación
El proyecto Ateneos de Fabricación (Ateneos de Fabricación, 2016), comporta innovación social al satisfacer necesidades sociuales, así como por el hecho de impulsar procesos colectivos de creación difusión e implementación de nuevas practicas comunitarias.
Objetivos
Los Ateneos de Fabricación tienen unos objetivos claros que son de innovación social, pero que a su vez permiten dinamizar la economía en su área de influencia a través de unos objetivos claros:
- Acercar la tecnología y la ciencia de la fabricación digital (y sus aplicaciones) a toda la ciudadanía: personas, colectivos, entidades, empresas, escuelas e instituciones.
- Desarrollar modelos de participación y trabajo en red, orientados a la innovación social y al fomento de la economía colaborativa, que promuevan nuevas formas de comunicación, de intercambio de talento y de aprendizaje abierto y compartido.
- Apoyar a proyectos que tengan reversión social y sean transformadores para un colectivo, para el barrio, para la ciudad o para el mundo. A cambio de utilizar los recursos públicos de un Ateneo de fabricación (espacios, máquinas y personas) se requerirá una o más contraprestaciones.
- Compartir el conocimiento generado en todos los procesos para el máximo aprovechamiento de estos.
Programas transversales
También, y es precisamente lo que le da la potencia al proyecto, consta de tres programas transversales a toda la red de Ateneos que se centran en fomentar e impulsar la innovación social ciudadana:
- Pedagógico: junto con el Consorcio de Educación de Barcelona tiene como objetivo vincular la fabricación digital con el sistema educativo.
- Familiar: pretende cerrar el círculo virtuoso educativo entre el hogar y los chicos y chicas, llevando el aprendizaje al entorno familiar.
- Innovación social: quiere crear impacto en el territorio cercano a la instalación, para poder aflorar el talento oculto, crear cohesión social y dar oportunidades a las personas y colectivos que de otra manera nunca se acercarían a una impresora 3D (como es el caso del que hay en el barrio de “Les Corts” de Barcelona) para poder emprender y así posibilitar una acción de nueva economía.
Especialización
En este proyecto de innovación social también existe la especialización, con una red urbana de Ateneos que hacen foco en diferentes temáticas:
- Les Corts: impresión 3D
- Ciutat Meridiana: ocupación laboral
- La Fábrica del Sol: energías renovables
Esta especialización da, en su conjunto, una diversidad temática y los entornos especializados (tanto materiales como profesionales) para fomentar en cada uno de ellos una atención a los ciudadanos y unas sinergias mucho mayores entre ellos, que de otra manera podrían desperdiciarse.
Conclusiones
El potencial que tiene la economía tradicional conjuntamente con la innovación social para transformar la economía real de las ciudades y sus ciudadanos es enorme.
Partiendo de una buena estrategia de ciudad, con una visión a largo plazo, holística, y adaptada a la idiosincrasia del territorio, podemos llegar a impactar directamente en el centro de nuestras actuaciones: el ciudadano.
La aplicación de las TIC, en este caso concreto a través de plataformas de monedas locales, aún potenciará más las actuaciones y redundará en una mayor percepción e impacto de los beneficios que comporta el paradigma smart.
Referencias
- Alvin Toffler,2006, “Riqueza revolucionaria”.
- Ateneos de Fabricación, 2016.
- Bristol Pound, 2016.
- Digipay4growth, 2016.
- LM3, 2016.
- Pablo Sanchez Chillón, Urban360, 2013.
- RTVE, “Monedas de cambio”, 2016.
- Santa Coloma de Gramenet, 2016.
- Sol Violette, 2016.