Comunicación presentada al III Congreso Ciudades Inteligentes:
Autores
- Raúl-Tomás Mora-García, Prof. ayudante doctor, Dpto. Edificación y Urbanismo, Univ. Alicante
- María-Francisca Céspedes-López, Prof. asociado, Dpto. Edificación y Urbanismo (UA)
- Raúl Pérez-Sánchez, Prof. titular de universidad, Dpto. Edificación y Urbanismo (UA)
- Juan-Carlos Pérez-Sánchez, Prof. titular de escuela universitaria, Dpto. Edificación y Urbanismo (UA)
Resumen
En la actualidad existen grandes fuentes de información georreferenciada que aportan datos relevantes para estudios sobre el territorio y las ciudades, como son las Infraestructuras de Datos Espaciales (IDE) nacionales y autonómicos, la Sede Electrónica del Catastro, el Instituto Nacional de Estadística, o proyectos como OpenStreetMap. Esta investigación tiene como objetivo mostrar cómo integrar la información de distintas fuentes de datos en un sistema de información geográfica, que permita un análisis global de la ciudad y facilite, a los planificadores urbanos y a los responsables políticos, la toma de decisiones para mejorar la calidad de las ciudades. Se presenta un estudio de caso de la ciudad de Alicante donde se ha construido un SIG para identificar problemas en los tejidos urbanos, así como establecer recomendaciones para proponer áreas de actuación que permitan mejorar la calidad de vida de los ciudadanos.
Palabras clave
Open Data, Calidad de Vida, Calidad Urbana, SIG, Catastro
Introducción
En la actualidad existe mucha información elaborada por distintas instituciones que pueden ser reutilizadas para distintos fines, como el comercial o en investigación. El sector público es actualmente la principal fuente de información, gracias a transposiciones de directivas europeas como la Ley 37/2007 sobre reutilización de la información del sector público (BOE-A-2007-19814). Otros instrumentos están surgiendo para completar las herramientas que permitan una mayor reutilización de la información, como la Norma Técnica de Interoperabilidad de Reutilización de recursos de la información (BOE-A-2013-2380), las Normas para Ciudades Inteligentes que se están desarrollando dentro del Comité Técnico AEN/CTN 178 de AENOR, entre otros.
España dispone de una Infraestructura de Datos Espaciales (www.idee.es) que cuenta con amplia información nacional, autonómica y local. Desde el Instituto Geográfico Nacional (www.ign.es) se pueden descargar ortofotos del Plan Nacional de Ortofotografía Aérea (PNOA) de máxima actualidad y máxima resolución, modelos digitales del terreno con distintos tamaños de malla, ficheros digitales de nube de puntos LiDAR con información altimétrica, cartografía del Sistema de Información de Ocupación del Suelo en España (SIOSE) o la base de datos de ocupación del suelo para España (proyecto europeo Corine Land Cover), entre otros.
Otra fuente de información relevante en España es la que elabora la Dirección General del Catastro (DGC), y que se publica a través de la Sede Electrónica del Catastro. Contiene información muy útil para los estudios territoriales y urbanos, estructurada en dos bloques: los datos espaciales y los datos alfanuméricos o literales. Aunque esta información es de libre acceso, se le da poco uso debido a la dificultad técnica existente para explotar los datos, ya que requieren de ciertos conocimientos sobre la estructura de los datos catastrales y comprender qué información se puede extraer de ellos (Mora-García, 2016). La más sencilla de recuperar es la cartografía vectorial, pero carece de información alfanumérica relevante, por lo que es necesario asociarle nuevos datos alfanuméricos para que den valor a los datos espaciales.
Por otro lado, cada comunidad autónoma cuenta con una Infraestructura de Datos Espaciales, con información específica de elaboración propia o derivada de la IDEE. En la Comunidad Valenciana existe Terrasit (terrasit.gva.es), donde se pueden descargar ortofotos del PNOA por municipio y año de vuelo, el planeamiento urbanístico de la Comunitat Valenciana, o el Plan de Acción Territorial de carácter sectorial sobre prevención del Riesgo de Inundación en la CV (PATRICOVA).
Los ayuntamientos de grandes ciudades como Madrid, Barcelona o Valencia (entre otros), ya cuentan con portales con información Open Data orientados a la reutilización de datos por las empresas y los consumidores (Iglesias, 2014). Otras entidades municipales dedicadas al transporte, como la Empresa Municipal de Transportes de Madrid o la entidad de Transports Metropolitans de Barcelona, también disponen de datos abiertos que permiten georreferenciar y monitorizar sus sistemas de transporte.
Existen otras iniciativas de datos abiertos y trabajo colaborativo como OpenStreetMap (OSM), un proyecto que se encarga de crear mapas libres y editables. Cuenta con amplia información de carreteras y calles, zonas verdes, puntos de interés, etc., con una gran cobertura nacional e internacional.
La capacidad de las instituciones para generar información normalmente está condicionada por su tamaño. Se plantea la problemática que tienen muchos municipios medios y pequeños, que no disponen de infraestructuras ni personal para elaborar información que permita avanzar en el concepto de ciudad inteligente. Esta barrera para disponer y elaborar información, supone un retraso a la hora de implantar cualquier estrategia encaminada a mejorar la calidad de vida de las personas en las ciudades.
En esta comunicación se muestra un estudio de caso en la ciudad de Alicante, donde se integra información de distintas fuentes de datos en un sistema de información geográfica (SIG). Con esta información se pretende realizar un análisis global de la ciudad que facilite, a los planificadores urbanos y a los responsables políticos, la toma de decisiones para mejorar la calidad de las ciudades.
Metodología
El método utilizado es el inductivo, a partir del cual se extraen teorías o conclusiones de carácter general a partir de hechos particulares. El diseño de investigación es no experimental de tipo transversal, mediante el cual se recolectan datos de un solo grupo de interés en un único momento temporal, con el propósito de describir variables y analizar su incidencia e interrelación en ese momento dado.
Se propone como caso de estudio el municipio de Alicante, capital de provincia, situado en la Comunidad Valenciana (España). Representa un modelo urbano compacto, de gran extensión y considerado en el contexto nacional como un municipio grande por número de habitantes (puesto 11 según censo de 2011).
Utilizando la información alfanumérica y vectorial de Catastro, se confecciona una base de datos con información a escala de parcela catastral, lo que permite caracterizar el parque edificado con variables como la edificabilidad, la tipología constructiva, la antigüedad, el número de viviendas, etc. A partir de esta información, se realiza un proceso para desagregar los datos poblacionales del INE y estimar el número de habitantes por edificio. El siguiente paso consiste en cuantificar las distancias entre cada edificio y los servicios públicos como hospitales, centros de salud, zonas verdes, paradas de transporte urbano, entre otras dotaciones.
A partir de la información recopilada a escala de parcela catastral, y utilizando otras fuentes de información espacial, se calculan unos indicadores básicos a escala de rejilla o celda (por ejemplo de 200×200 m) o mediante mapas de densidad. Con estos indicadores objetivos se pretende modelizar los entornos urbanos, cuantificando diversos aspectos urbanos y sociales. Indicadores como la densidad de población, la razón de dependencia de mayores y juvenil, el porcentaje de población extranjera, la densidad edificada, el tamaño medio de vivienda, la antigüedad media edificada, la densidad de zonas verdes por habitante o superficie, y la proximidad a servicios públicos.
A partir del análisis y superposición de estos indicadores, es posible detectar zonas con deficiencias en servicios y dotaciones, así como identificar zonas urbanas vulnerables o deprimidas, todo ello en pro de una sociedad mejor, permitiendo establecer criterios de actuaciones urbanas que mejoren la calidad de vida de los ciudadanos.
Fuentes de información
El sistema de información geográfica se ha confeccionado a partir de datos procedentes de distintas fuentes (ver Tabla I).
La información más relevante en este contexto se obtiene de la Sede Electrónica del Catastro, previo procesado de los datos, permitiendo caracterizar el parque edificado a escala de parcela catastral. Para ello se han utilizado los datos alfanuméricos de las parcelas catastrales y la cartografía vectorial, siendo necesario un proceso de transformación muy importante ya que Catastro distribuye los datos en bruto (sin relación entre los mismos), y es el usuario quien tiene que transformar la información en función de sus necesidades.
Los vuelos aéreos han sido utilizados como instrumentos de apoyo a la cartografía vectorial para definir con más fidelidad la ciudad, ayudando a situar y localizar más fácilmente los elementos urbanos.
Otra fuente de mucha utilidad ha sido el Planeamiento de la Comunidad Valenciana, el cual ha permitido identificar la clasificación y calificación urbanística del suelo de los municipios estudiados. Es una base de datos que no está exenta de errores, pero ha facilitado sobremanera el desarrollo del trabajo, ya que solo ha sido necesario revisar y verificar la información existente, corrigiendo los datos erróneos o faltantes. Las zonas verdes y la red carreteras se han extraído de esta cartografía, incorporándose y modificándose manualmente algunas geometrías utilizando como base los vuelos aéreos.
Los datos alfanuméricos de población suministrados por el INE han sido relacionados con las secciones censales vectoriales de la Comunidad Valenciana para definir espacialmente cómo es la distribución poblacional sobre el territorio.
Una fuente de información inédita ha sido la base de datos del transporte urbano del municipio, la cual ha sido de elaboración propia, adaptándose a las necesidades de esta investigación. En ella se han georreferenciado las paradas de autobuses urbanos, así como el trazado viario que recorre cada línea de autobús.
Otro tipo de información utilizada, procedente de diversas fuentes y de elaboración propia, corresponde a los puntos de interés relativos a los hospitales y centros de salud, las farmacias, los centros educativos, las instalaciones deportivas y las bibliotecas municipales.
Resultados
Cada una de las fuentes anteriores genera una capa de información en el SIG (Figura 1), y mediante análisis espaciales es posible cuantificar indicadores urbanos y sociales, ya sean estos a escala de rejilla o mediante mapas de densidad (Figura 2).
También es posible estimar la cantidad de población que abarca una determinada dotación pública en función de la distancia, tanto gráficamente (Figura 3) como espacialmente (Figura 4). El análisis de esta información permite a los planificadores urbanos tomar decisiones de ubicación de infraestructuras y dotaciones, o de mejora de servicios públicos como el transporte urbano.
Discusión y conclusiones
A partir de información dispersa y de muy diferente procedencia, ha sido posible confeccionar un sistema de información geográfico que ha permitido representar distintos aspectos urbanos y poblacionales. Toda la información se ha recabado de fuentes públicas, y en caso de no existir, ha sido necesario la elaboración propia.
Muchos organismos públicos, con pocos medios humanos y técnicos, van a poder confeccionar datos georreferenciados a un bajo coste de adquisición, facilitando así su posterior reutilización en el ámbito comercial, de investigación o para la ciudadanía. Este es un paso previo, y muy importante, a la hora de iniciarse en un desarrollo urbano basado en la sostenibilidad (Smart City), que sea capaz de adecuarse a las necesidades de las instituciones, las empresas y los ciudadanos.
Esta información georreferenciada, puede ser procesada y analizada mediante métodos estadísticos con diversas finalidades, desde cuantificar la calidad urbana o la calidad de vida de los ciudadanos hasta ofrecer servicios que aprovechen y mejoren las dotaciones públicas.
Entre otros aspectos, es posible detectar deficiencias en los servicios y dotaciones, así como identificar zonas urbanas vulnerables o deprimidas. Otro enfoque consiste en valorar las necesidades particulares de cada barrio o entorno construido y que ayude a la toma de decisiones en las intervenciones urbanas municipales, priorizando unas sobre otras en función de las necesidades de la ciudadanía.
Referencias
- Iglesias, C., 2014, Open data como herramienta para las smart cities, (06 febrero 2017).
- Jefatura del Estado, 2007, Ley 37/2007 sobre reutilización de la información del sector público.
- Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas, 2013, Resolución de 19 de febrero de 2013, de la Secretaría de Estado de Administraciones Públicas, por la que se aprueba la Norma Técnica de Interoperabilidad de Reutilización de recursos de la información.
- Mora-García, R.T., 2016, Modelo explicativo de las variables intervinientes en la calidad del entorno construido de las ciudades, tesis doctoral, Universidad de Alicante.
- Infraestructura de Datos Espaciales de España, (06 febrero 2017).
- Instituto Geográfico Nacional, (06 febrero 2017).
- IDE de la Comunidad Valenciana, (06 febrero 2017).
- Ayuntamiento de Barcelona, (06 febrero 2017).
- Ayuntamiento de Madrid, (06 febrero 2017).
- Ayuntamiento de Valencia, (06 febrero 2017).