Comunicación presentada al VI Congreso Ciudades Inteligentes
Autor
Ricardo Vázquez Martínez, Responsable Área Evaluación, Observatorio Nacional de las Telecomunicaciones y de la Sociedad de la Información – ONTSI, Entidad Pública Empresarial Red.es
Resumen
Desde el ONTSI se ha establecido la necesidad de abordar la configuración de un modelo de maduración de los Destinos Turísticos Inteligentes para poder hacer un seguimiento más sistemático de lo que supone la transformación de un destino turístico en un DTI, analizar dicho proceso y poder evaluar, en su caso, la sostenibilidad de dicho cambio y del propio destino turístico como destino inteligente. Sobre la base de los modelos planteados para la formulación de un modelo de maduración de ciudades inteligentes, y los elementos constitutivos de la transformación del destino definidos por SEGITTUR y la propuesta realizada por AENOR para considerar un DT como DTI, desde el ONTSI se ha diseñado una primera aproximación al modelo de maduración del DTI tratando de incorporar e integrar todas aquellos elementos que consideramos básicos para medir esa maduración y cómo el destino lo aborda o la ha abordado. Esta formulación tendrá una utilidad adicional, la de poder convertirse en un marco básico para establecer los elementos para evaluar dicha transformación del destino.
Palabras clave
Destino Turístico Inteligente, Modelo, Maduración, Transformación Tecnológica, Evaluación, Gobernanza
Introducción
Del Destino Turístico al Destino Turístico Inteligente
En la actualidad toda la actividad humana se hace más global y tecnificada, como se advierte al decir, que “todo está conectado”. El acceso a la información, a distintos servicios es cada vez más rápido e inmediato y está así cambiando las formas y maneras en los que entendemos nuestra sociedad. Todas las actividades humanas especialmente se ven influenciadas por las nuevas formas de Gobernanza, de acceso y transmisión a la información o los servicios, de cómo los ciudadanos y empresas esperan cubrir sus necesidades o como los gobiernos son cada vez más conscientes de hacer un mejor uso de los recursos – en general escasos – para hacerlo de forma más eficiente y eficaz y responder a dichas necesidades y por otro lado, los ciudadanos, también quieren ser más partícipes de la gestión política, quieren obtener el máximo rédito de su relación con el ámbito público, valoran más lo hecho y cómo se ha hecho y, en paralelo al propio pensamiento de los responsables públicos también son conscientes de la necesidad de un uso responsable de los bienes de los que se dispone, haciendo sostenible la propia vida futura de quienes son partícipes de esta sociedad.
Partiendo de las premisas señaladas en el párrafo anterior, la actividad empresarial en general y la turística, en este caso en particular, no es ajena a esa necesidad de transformación social, económica y tecnológica que supone la transformación de un Destino Turístico (en adelante DT), en un Destino Turístico Inteligente (en adelante DTI).
Los gestores de estos DT son cada vez más conscientes de la necesidad de:
- Mejorar la oferta turística de su territorio para establecer nuevos productos y servicios y seguir siendo competitivos.
- Establecer nuevos y mejores servicios que mejoren la experiencia turística del visitante
- Desarrollar políticas turísticas que hagan igualmente sostenible la propia subsistencia de la ciudad como DT.
- Favorecer con este cambio, la participación de los visitantes y ciudadanos residentes en la formulación y gestión de la actividad turística.
Hay que tener en cuenta que en el sector turístico no es ajeno, sino que se convierte por las características del negocio en un sector clave y especialmente adecuado para que las nuevas tecnologías, la gestión de la actividad de manera inteligente y el seguimiento y el análisis del negocio tengan campo suficiente para hacerlo más eficiente, diverso y mejor gestionado.
El porqué de un modelo de maduración de un DTI
Desde el punto de vista práctico y de la literatura sobre el desarrollo de los DTI no hemos encontrado una formulación expresa sobre cómo se podría plantear un modelo de maduración de los DTI con el objetivo de establecer los elementos que ayudasen a monitorizar, hacer el seguimiento, valorar y evaluar, en su caso, el proceso de transformación del DT en un DTI. Desde el ONTSI hemos abordado esta cuestión desde una base que parte de los modelos de maduración del gobierno escocés (2014) o lo planteado por la consultora IDC (2015), para las ciudades digitales. Además, este modelo podría convertirse en un instrumento para la valoración y evaluación de los resultados e impacto de las intervenciones puestas en marcha por red.es para el impulso y la financiación de iniciativas y proyectos de desarrollo de DTI.
El origen del modelo de maduración
Ciudades inteligentes vs Destinos Turísticos Inteligentes
El desarrollo de los DT hacia su transformación parte de la propia transformación de la ciudad-destino en una ciudad inteligente. Por eso podemos decir, que, en origen, ambos ámbitos, el de la ciudad y el del destino inteligente pueden tener, en una parte significativa de su transformación el mismo origen. Ese mismo origen se traduce, así, en tres elementos principales:
- En primer lugar, el uso de las TIC, ya que supone el uso de nuevas y distintas herramientas que permiten la mejora y la prestación de nuevos servicios. Ej. Desarrollo de Wifi, sensores para la obtención de información, generación de sistemas de tratamiento de datos, datos abiertos, etc.
- En segundo lugar, tanto en las CI como en los DTI se busca la eficiencia en el uso de recursos y fundamentalmente en la prestación de servicios y la generación y desarrollo de servicios públicos en distintas áreas de desarrollo de la ciudad (movilidad, sostenimiento medioambiental, economía, etc.
- En ambos ámbitos, en las CI y en los DTI, se busca igualmente, un desarrollo sostenible. Sostenibilidad integral que se traslada a distintos ámbitos económico, tecnológico, medio ambiental y/o social.
- Y, por último, destacamos, la integración de infraestructuras tecnológicas y servicios públicos para la ciudad o el DTI, ajustando su gobernabilidad, la organización de las áreas o su gestión integrada.
Como he señalado al principio de este apartado, esto no significa que las CI sean similares a los DTI, cada uno en su ámbito y enfoque también presenta diferencias significativas que van a afectar, entre otros aspectos a la forma de abordar su desarrollo, crecimiento y sostenimiento futuro. Como señala Lamfus (2015), se afirma que un Destino turístico es inteligente cuando hace uso intensivo de la infraestructura tecnológica con el fin de:
- Mejorar la experiencia turística de los visitantes, personalizar y hacer que tomen conciencia de los productos y servicios turísticos disponibles en el Destino.
- Profesionalizar instituciones de gestión de Destinos, instituciones locales y empresas de turismo para tomar decisiones y realizar acciones basadas en datos producidos, dirigidos y procesados usando las TIC.
Modelo de maduración de una ciudad inteligente
Desde el año 2014, se han desarrollado varias iniciativas encaminadas a formular un modelo de maduración de las ciudades hacia ciudades inteligentes. Desde el ONTSI inicialmente ya hemos trabajado, tomando como base los análisis y los modelos de maduración que desde distintas instancias (Gobierno Escocés y consultora IDC, esencialmente), la configuración de un modelo de maduración, que permitiese complementar y favorecer un análisis más específico y completo de lo que significa el proceso de transformación de la ciudad.
De ese primer análisis, la integración de ambos modelos de maduración podría convertirlos en un modelo sobre la base de inicialmente cinco grandes áreas de desarrollo (Estrategia, Datos, Tecnología, Gobernanza/Procesos y Cultura/ Compromiso con los agentes). Para el ONTSI este modelo, deberá ser completado por dos elementos adicionales, por su importancia y peso: el desarrollo sostenible en el tiempo de la ciudad inteligente y la creación alrededor de la ciudad de un ecosistema digital impulsado por dicha transformación e impulsor igualmente de la misma.
El modelo de maduración del destino turístico
Propuesta de modelo
Desde el ONTSI y de manera general, se plantea una formulación, con ya una base: cómo se ha configurado el modelo de maduración para ciudades inteligentes, incorporándose al modelo las particularidades del DTI. Así tendremos:
- Los ejes de desarrollo de transformación del DTI (definidos por SEGITTUR): tecnologías y datos, sostenibilidad, innovación y accesibilidad.
- El desarrollo de servicios inteligentes, la gestión inteligente de la ciudad y la mejora del uso de recursos, medios y la prestación de servicios a residentes y turistas.
- La integración del DTI en un entorno cambiante, global, que ha de ser accesible a los residentes y visitantes y natural, patrimonial y socialmente sostenible para el futuro.
- La incorporación de las tecnologías y la gestión de la información como factores de impulse del DTI.
A estos ejes, se incorporarían como elementos del modelo de maduración, los siguientes:
- La gestión inteligente de un Destino debe venir planificada, por ello, debe introducirse en el modelo la necesidad de generar y poner en marcha una estrategia que permita organizar el modelo de DTI.
- Saber a quién van dirigidas las actuaciones dentro del DTI. El principal agente destinatario será el turista (centro de la actividad) e igualmente hay que contar con los demás agentes interesados, los gestores del mismo, las empresas de la ciudad –sean del sector turístico o no -, y los residentes del Destino.
Y, al igual que hemos hecho en el análisis del proceso de maduración de las ciudades digitales, creemos importante tomar en consideración dos elementos adicionales de forma separada.
- Tiene que ver con la gobernanza: el modelo de gestión que se propone para el desarrollo del DTI.
- Tiene que ver con la sostenibilidad económica del DTI, enmarcada en la necesidad de crear alrededor del Destino de una oferta turística atractiva, innovadora y ajustada a la demanda de los turistas, que se vea correcta y efectivamente reflejada en un sector empresarial – ecosistema– que permita desarrollar, primero la oferta turística, y segundo los servicios de apoyo para convertir la experiencia turística del visitante en una experiencia de calidad en el que la participación del sector tecnológico se antoja imprescindible.
Áreas del modelo
Analizando más específicamente los elementos del modelo tenemos que:
Utilidad del modelo
Este modelo de maduración puede ser un instrumento válido para la evaluación de iniciativas o proyectos financiados desde el ámbito público y de la propia evaluación de la transformación del DT. Se centraría en responder a cuestiones que, en cada elemento identificado, se convertirían en sus factores de éxito, cuestiones como: ¿Se han establecido acciones para integrar las estrategias de ciudad con la de DTI? ¿Se han llevado a cabo un análisis de las infraestructuras TIC existentes? ¿Se han planteado en el DT una estrategia para la gestión de datos? ¿Se han establecido acciones integradas para desarrollar la sostenibilidad del DT? ¿Se han impulsado acciones para favorecer el impulso de proyectos innovadores dentro del DT? ¿Se ha creado un Ente gestor del DTI? ¿Quiénes participan del Ente? ¿Han podido participar las empresas de manera activa en la configuración de la estrategia del DT? ¿De qué modo ha cambiado el Ecosistema TI por la transformación en DTI? ¿Cómo se ha integrado el Ecosistema inteligente en la gestión del DTI?
Referencias
- SEGITTUR “Smart Destination. Informe Destinos Turísticos inteligentes construyendo el futuro”, 2015.
- UNWTO Pacto Mundial Red Española. El sector turístico y los ODS. Turismo responsable un compromiso de todos, 2016.
- URBANTIDE Gobierno escocés. “Maturity model Scotish Government”, 2014.
- IDC “Smartcities cities maturity model”, 2015.
- AENOR. UNE 178001. “Sistemas de Gestión de los Destinos Turísticos Inteligentes”, 2016
- EXCELTUR “Monitor de Competitividad Turística de los Destinos Urbanos Turísticos Españoles”.
- UNWTO “Turismo accesible para todos: Una oportunidad a nuestro alcance”. OMT. 2016.