La empresa Nexus Geographics ha colaborado con la Universidad de Barcelona en el diseño y desarrollo de una plataforma web interactiva, denominada Atlas of Unburnable fossil fuels, para presentar y visualizar el proyecto de investigación Unburned, que analiza qué reservas de combustibles fósiles no se deberían quemar para cumplir con los objetivos del Acuerdo de París y evitar los efectos más graves del cambio climático.
Las reservas conocidas de combustibles fósiles contienen aproximadamente 11.000 GtCO₂, de las cuales 3.286 GtCO₂ no forman parte de las zonas de exclusión existentes. Para alcanzar los objetivos del Acuerdo de París y limitar el calentamiento global por debajo de 1,5ºC, el presupuesto de carbono restante (RCB) era de 250 GtCO₂ a 1 de enero de 2023. El RCB es el CO₂ que aún se puede emitir a la atmósfera sin superar el umbral de 1,5ºC. Al ritmo de emisiones actual, de 40 GtCO₂ anuales, se prevé que el RCB se agote en 2030.
En el visor web desarrollado con la colaboración de Nexus Geographics, los usuarios pueden explorar de manera interactiva datos geográficos sobre reservas que no deberían ser explotadas. Estos datos se integran en un mapa que facilita la comprensión de los resultados del proyecto Unburned de una manera visual, informativa y fácilmente consultable.
Este atlas permite establecer criterios que guíen las decisiones sobre qué reservas de combustibles fósiles deben protegerse para evitar el mayor número posible de factores negativos asociados al incremento de las temperaturas.
Impulso a la transición energética
Un equipo de investigación de la Universidad de Barcelona ha estudiado la localización espacial de las fuentes de combustibles fósiles conocidas y ha añadido características sociales, ambientales y económicas con el objetivo de establecer criterios claros para definir nuevas áreas de exclusión.
Estas áreas deben permitir no superar el presupuesto de carbono restante y, a su vez, proteger la riqueza endémica, la biodiversidad y las poblaciones autóctonas que dependen de los territorios donde se encuentran. La aplicación de estos criterios ayudará a proteger ecosistemas valiosos y comunidades vulnerables, así como facilitará una transición más equitativa hacia un modelo energéticamente sostenible.
En definitiva, con este atlas se busca reforzar la urgencia de reducir la dependencia de los combustibles fósiles y acelerar la implementación de energías renovables con el fin de proteger el medio ambiente para asegurar un futuro sostenible.