El Centro Común de Investigación (JRC) de la Comisión Europea ha publicado un informe titulado ‘Señales débiles en ciencia y tecnologías – 2024’, que refleja que Europa ocupa una posición destacada en la investigación en tecnologías emergentes, como la inteligencia artificial o los gemelos digitales. Sin embargo, se enfrenta a una serie de desafíos y necesita una inversión estratégica para mantener su ventaja competitiva.

Anticipar las tecnologías emergentes es crucial para la competitividad de Europa, ya que permite a los responsables políticos aprovechar sus beneficios y abordar los posibles impactos sociales, económicos y de seguridad.
En este contexto, el objetivo del nuevo informe del JRC es aportar conocimientos sobre los últimos avances en estas tecnologías y analizar su impacto potencial en la sociedad. Se basa en una metodología cuantitativa diseñada para detectar señales débiles de desarrollo tecnológico o indicadores muy tempranos.
Analiza un total de 221 tecnologías emergentes detectadas a lo largo de 2024, distribuidas en 12 clústeres temáticos entre los que se encuentran los gemelos digitales, la inteligencia artificial y el machine learning, las TIC, el sector e-salud, la movilidad y el transporte, el medio ambiente y la agricultura, la energía o la computación cuántica y la criptografía.
Señala como tendencias el énfasis en la sostenibilidad y el impacto medioambiental, la integración interdisciplinaria, la incorporación de la IA y el aprendizaje automático a diversos campos tecnológicos para transformar los procesos tradicionales y permitir nuevas capacidades, los avances en personalización y precisión, el abordaje no invasivo y mínimamente invasivo, la digitalización de sistemas y toma de decisiones basada en datos, y una mayor atención a la seguridad y a la privacidad de los datos.
Conclusiones del informe sobre tecnologías emergentes
El documento concluye que Europa ocupa una posición sólida en la mayoría de las tecnologías analizadas, especialmente en los ámbitos de los gemelos digitales, la IA y el machine learning, la energía, y el medio ambiente y la agricultura.
El ecosistema europeo de I+D no muestra especialización en la mayoría de los clústeres de tecnologías emergentes, excepto en inteligencia artificial y aprendizaje automático. En este ámbito, Europa muestra un cierto grado de especialización, aunque en menor medida que China. Esto indica que las organizaciones europeas están más centradas en estas tecnologías y aportan una parte proporcionalmente mayor de conocimiento científico en este ámbito en comparación con otros clústeres de tecnologías emergentes.
Además, el informe indica que las organizaciones europeas contribuyen de manera significativa a las publicaciones científicas y son responsables del 1% de los artículos científicos de mayor impacto. Sin embargo, Estados Unidos y China son líderes en materia de patentes y en producción de conocimiento científico en la mayoría de los grupos de tecnologías emergentes del estudio.
En este sentido, el informe destaca la importancia de la colaboración internacional y del intercambio de conocimientos. Asimismo, afirma que Europa necesita invertir estratégicamente en la mejora de su panorama de I+D y que el apoyo al desarrollo de las tecnologías emergentes puede promover la innovación, la competitividad y el crecimiento sostenible, mejorando así la vida de la ciudadanía.