La Comisión Europea ha anunciado que la Ley de Ciberresiliencia ha entrado en vigor, estableciendo requisitos obligatorios de ciberseguridad para los productos que incluyen elementos digitales con el objetivo de proteger a la ciudadanía y a las empresas de las amenazas cibernéticas.
La nueva Ley de Ciberresiliencia introduce mayores responsabilidades para los fabricantes a la hora de garantizar la seguridad de los productos de hardware y software. Uno de los elementos centrales de esta legislación son las nuevas obligaciones de los fabricantes de proporcionar actualizaciones de software que solucionen las vulnerabilidades y ofrezcan asistencia en materia de seguridad a los consumidores.
Refuerzo de la ciberseguridad en Europa
Al mejorar la transparencia sobre los riesgos cibernéticos y la seguridad de los productos, la norma permite a los consumidores tomar decisiones más informadas sobre los productos digitales disponibles en el mercado de la UE. Para ello, los productos llevarán el marcado CE para indicar que cumplen los requisitos de la Ley de Ciberresiliencia. Las principales obligaciones de la legislación se aplicarán a partir del 11 de diciembre de 2027.
La Ley de Ciberresiliencia complementa el marco de ciberseguridad NIS2, que entró en vigor el año pasado. Forma parte de una serie de medidas integrales que la Unión Europea está implementando para reforzar la ciberseguridad de una Europa cada vez más digital y conectada.