El Consejo Europeo ha adoptado unas conclusiones sobre el futuro de la ciberseguridad con la finalidad de proporcionar orientaciones y establecer los principios para construir una Unión Europea más cibersegura y resiliente.
En los últimos años, las amenazas de ciberseguridad han aumentado considerablemente en nivel, complejidad y escala. Para garantizar la seguridad de ciudadanía, gobiernos y empresas, el Consejo Europeo quiere sentar las bases del futuro de la ciberseguridad.
En este sentido, pide priorizar la atención a la implementación, la adopción de normas armonizadas, la certificación, la seguridad de la cadena de suministro, la cooperación con el sector privado, el apoyo a las pymes y una financiación adecuada.
Implementación, cooperación y financiación
Las conclusiones del Consejo Europeo destacan la importancia de centrarse en la implementación, reforzar la coordinación y evitar la fragmentación de las normas de ciberseguridad en la legislación.
Además, instan a aclarar en mayor medida las funciones y responsabilidades en el ámbito cibernético, reforzar la cooperación en la lucha contra la ciberdelincuencia y trabajar en un plan director revisado del marco de gestión de crisis de ciberseguridad.
Asimismo, destaca el apoyo a las microempresas y pymes, y la necesidad de dar respuesta a los desafíos que plantean las nuevas tecnologías. Para cubrir el déficit de capacidades, también anima a adoptar un enfoque multilateral que incluya la colaboración con el sector privado y el mundo académico.
Asimismo, las conclusiones subrayan la importancia de atraer capital privado y de una financiación adecuada. Igualmente, destacan el papel de la política internacional activa para reforzar la cooperación con terceros países, en particular en el contexto transatlántico, y contribuir a un ecosistema mundial más sólido.
Por último, el Consejo propone a la Comisión Europea y al Alto Representante que presenten una estrategia de ciberseguridad revisada para hacer frente al creciente nivel de amenazas.