Acuerdo sobre el Reglamento de la Red RTE-T para garantizar una movilidad sostenible en la UE

Acuerdo provisional sobre el Reglamento de la Red RTE-T para garantizar una movilidad sostenible en la UE

El Consejo Europeo y el Parlamento han alcanzado un acuerdo provisional acerca del Reglamento revisado sobre las directrices de la UE para el desarrollo de la Red Transeuropea de Transporte (RTE-T). El objetivo es construir una red de transporte que garantice una conectividad sostenible en toda Europa sin interrupciones físicas ni cuellos de botella.

Las directrices para el desarrollo de la Red Transeuropea de Transporte (RTE-T) contribuirán a alcanzar los objetivos de movilidad sostenible de la UE.

La Red RTE-T contribuirá a lograr los objetivos europeos en materia de movilidad sostenible, al adecuado funcionamiento del mercado interior y a la cohesión económica, social y territorial de la Unión Europea. Será desarrollada o actualizada gradualmente a través del nuevo Reglamento, que establece tres plazos claros para la finalización: el núcleo deberá estar completado para 2030, el núcleo extendido para 2040 y la red integral para 2050.

El acuerdo provisional mantiene la ambición de desarrollar una infraestructura de transporte fiable, fluida, coherente, conectada y de alta calidad en toda la UE, considerando los diversos puntos de partida de los Estados miembros, sus recursos financieros disponibles y necesidades de inversión, así como sus prioridades y enfoques hacia un transporte más ecológico.

Los países comunitarios decidirán cómo priorizar proyectos de interés común, de acuerdo con requisitos técnicos orientados a una infraestructura unificada, de alto rendimiento y totalmente interoperable para contribuir a la descarbonización del sector del transporte y a su multimodalidad. El Reglamento establece que estos requisitos son proporcionales a los beneficios esperados, funcionalidades e inversiones requeridas para los Estados miembros.

Para garantizar que la planificación de infraestructuras cubre las necesidades operativas reales, y al integrar el ferrocarril, las carreteras y las vías navegables, el nuevo Reglamento crea nueve corredores europeos de transporte, cruciales para el desarrollo de flujos de transporte de mercancías y pasajeros sostenibles y multimodales.

Nodos urbanos

Para fortalecer la capa urbana de la política RTE-T, se ha acordado que para 2027 deberá establecerse en cada nodo urbano un Plan de Movilidad Sostenible (SUMP, por sus siglas en inglés) que integre transporte de pasajeros y mercancías a largo plazo para toda el área urbana funcional.

Las 424 ciudades principales ubicadas a lo largo de la red RTE-T tendrán que desarrollar su SUMP para promover la movilidad sin emisiones y aumentar y mejorar el transporte público y la infraestructura para peatones y ciclistas. Además, se mantiene la obligación de contar con una terminal de mercancías multimodal por nodo urbano antes del 31 de diciembre de 2040, cuando sea económicamente viable.

Seguridad vial, ferrocarril y coordinadores europeos

El acuerdo provisional ofrece a los Estados miembros la flexibilidad necesaria para abordar la seguridad vial de acuerdo con las condiciones locales. También recoge mejoras en el diseño de todas las carreteras principales y del núcleo ampliado, y el despliegue de zonas de aparcamiento seguras.

Adicionalmente, refleja la importancia del ferrocarril en el cambio hacia modos de transporte más sostenibles. En este sentido, incluye conexiones ferroviarias mejores y más rápidas para pasajeros y mercancías y una mejor integración de puertos, aeropuertos y terminales de mercancías multimodales en la red RTE-T. Igualmente, se mejorará la conectividad de los aeropuertos para reducir el número de vuelos nacionales.

Por otro lado, respalda el papel de los coordinadores europeos como facilitadores para garantizar la planificación de las inversiones y la implementación de las medidas necesarias para lograr los objetivos del Reglamento RTE-T. Asimismo, introduce una garantía financiera para los Estados miembros y un marco revisado para la aplicación del nuevo Reglamento.

Tras el acuerdo provisional, tendrá lugar el trabajo a nivel técnico. Posteriormente, la Presidencia del Consejo Europeo remitirá el texto a los representantes de los Estados miembros para su aprobación. La legislación también deberá someterse a una revisión jurídico-lingüística antes de ser adoptada formalmente y entrar en vigor.

Acuerdo provisional sobre el Reglamento Euro 7

El Parlamento Europeo y el Consejo también han alcanzado un acuerdo provisional sobre el Reglamento Euro 7, para la homologación de vehículos de motor y motores, y de los sistemas, componentes y unidades técnicas independientes destinadas a dichos vehículos, con respecto a sus emisiones y durabilidad. A continuación, debe ser respaldado y adoptado formalmente por ambas instituciones.

Este Reglamento mantiene los límites de Euro 6 para turismos y furgonetas, pero los reduce para autobuses y camiones. Asimismo, introduce límites para las partículas emitidas por los frenos y por la abrasión de los neumáticos, así como requisitos de vida útil para todos los vehículos y las baterías.

 
 
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