El primer informe sobre el estado de la Década Digital de la UE, publicado por la Comisión Europea, ofrece una visión integral de los avances en transformación digital que potencian una Europa digitalmente más soberana, resiliente y competitiva. El documento llama a la acción colectiva de los Estados miembros para abordar las actuales brechas de inversión, acelerar la digitalización e intensificar los esfuerzos para alcanzar los objetivos del programa político de la Década Digital. Asimismo, realiza recomendaciones horizontales y específicas por país.
El informe de 2023, el primero de una serie de documentos anuales, incluye una evaluación del desempeño de la Unión Europea hacia los objetivos para 2030 en materia de habilidades digitales, infraestructura digital y digitalización de las empresas y de los servicios públicos. También incluye el seguimiento de la Declaración europea sobre los derechos y principios digitales.
Cobertura gigabit y 5G
De cara al objetivo europeo de llevar la cobertura gigabit al 100% de la ciudadanía europea y las redes 5G a todas las áreas pobladas para 2030, el documento señala que las redes de fibra solo llegan al 56% de las viviendas, mientras que el 5G alcanza al 81% de la población, un porcentaje que desciende al 51% en zonas rurales.
El despliegue de redes 5G stand-alone se está retrasando y la calidad de la tecnología 5G aún no es suficiente respecto a las expectativas de los usuarios finales y las necesidades de la industria. El 55% de los hogares rurales todavía no cuentan con ninguna red avanzada y el 9% no dispone de ninguna red fija.
En este contexto, la Comisión Europea indica que se necesita una inversión adicional de hasta 200.000 millones de euros. Los Estados miembros deben mapear sus brechas de conectividad y explorar financiación para complementar la inversión privada en áreas que no son comercialmente viables.
Digitalización de servicios públicos y empresas
Los objetivos europeos prevén el acceso online a los servicios públicos clave, a los registros médicos electrónicos y a la identificación electrónica (eID) para el 100% de los ciudadanía y, cuando proceda, la posibilidad de que ciudadanos y empresas de la UE interactúen online con las administraciones.
Muchos Estados miembros están bien posicionados para lograr la total digitalización de los servicios públicos y registros sanitarios, así como para el despliegue de la eID, pero se necesitan más inversiones para mejorar la disponibilidad y el rendimiento transfronterizos. En cuanto a la cartera de identidad digital europea, estará totalmente desplegada en 2030, complementada por el euro digital.
Sin más inversiones e incentivos, el informe recoge que para 2030 solo el 66% de las empresas europeas utilizarán la nube, el 34% el big data y el 20% la inteligencia artificial, por debajo del objetivo del 75%. Además, solo el 69% de las pymes europeas alcanzan un nivel básico de intensidad digital, con un progreso desigual entre los Estados miembros. En este sentido, los países comunitarios deben crear conciencia sobre los beneficios de la digitalización y promover los Hubs Europeos de Innovación Digital.
Por su parte, la cifra de unicornios (empresas con una valoración superior a los 1.000 millones de euros) ha aumentado significativamente en la última década, por lo que la UE podría cumplir su objetivo antes de 2030. Sin embargo, sigue por detrás de Estados Unidos y China.
Habilidades digitales
El informe muestra que, en las condiciones actuales, para 2030 solo el 59% de la población dominará las habilidades digitales básicas y el número de especialistas TIC no excederá los 12 millones, frente a los objetivos del 80% y los 20 millones, respectivamente.
Para solucionarlo, los Estados miembros deben priorizar las inversiones en educación y capacidades de alta calidad, y fomentar la participación de las mujeres en STEM (ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas) desde una edad temprana.
Valores, principios y sostenibilidad
El informe sobre el estado de la Década Digital resalta el papel destacado de la UE en la creación de una transformación digital segura y centrada en las personas, como se establece en la Declaración europea de derechos y principios digitales.
Asimismo, señala que se han puesto en marcha medidas para hacer que la transformación digital sea más ecológica. No obstante, insta a realizar inversiones a través de planes nacionales o conjuntos para fomentar las soluciones digitales neutras en carbono y medidas de seguimiento mejoradas para medir la huella ambiental de los servicios de comunicaciones electrónicas.
Resultados de España
En el anexo referido a España, se constatan avances en las cuatro dimensiones de la Década Digital. En materia de competencias digitales, el 64% de la población posee habilidades básicas, frente al 54% de la Unión Europea; y el 38% habilidades por encima de básicas (frente al 26%). Además, se posiciona como cuarto país europeo en competencias digitales avanzadas, por primera vez se sitúa por encima de la media de la UE en el porcentaje de graduados TIC, que ha ascendido hasta el 4,8%; cuenta con un 4,3% de especialistas TIC sobre el total del empleo y se encuentra en tercer lugar en cuanto a mujeres expertas en TIC.
El documento también subraya que España está 35 puntos por encima de la media comunitaria en el ámbito del despliegue de fibra, es líder en adopción de la banda ancha ultrarrápida (más del 87% de la población con acceso a banda ancha dispone de estas prestaciones), el 93% de los habitantes tienen acceso a redes fijas de muy altas capacidades, la cobertura 5G es del 82% y el 98% del espectro 5G ha sido asignado.
En digitalización de las pymes España se sitúa prácticamente en la media europea y en transformación de los servicios públicos supera la media comunitaria. Entre otras cosas, la disponibilidad de los servicios púbicos online para la ciudadanía es del 86% y para las empresas del 91%, y el acceso a los historiales médicos electrónicos es del 83%.
Ahora, los Estados miembros describirán las acciones que tienen previsto llevar a cabo para alcanzar las metas establecidas en sus hojas de ruta nacionales, que se publicarán antes del 9 de octubre. Dentro de los dos meses posteriores a la adopción del informe, la Comisión Europea y los países comunitarios discutirán las observaciones preliminares en base a las recomendaciones emitidas en el documento.