El equipo de investigación NEO del Instituto de Tecnología e Ingeniería del Software ‘José María Troya Linero’ (ITIS) de la Universidad de Málaga (UMA) ha creado un sistema inteligente de sensores de bajo coste que pueden instalarse en distintos puntos de la ciudad con el propósito de controlar la circulación y el tránsito de personas para evitar aglomeraciones.
Según informa la Fundación Descubre, el sistema desarrollado por el equipo de investigación NEO es económico y fácil de instalar en cualquier espacio. Se basa en la localización de los dispositivos inteligentes que portan las personas y vehículos para conocer el número de transeúntes que confluyen en un mismo lugar.
La información se limita a la cantidad de dispositivos, sin incluir ningún tipo de dato personal de los usuarios, y la ubicación se determina mediante un número que identifica cada aparato de forma individual y lo diferencia del resto, el Media Access Control (MAC), que actúa como un DNI, pero asegurando la protección de la privacidad.
El sistema no requiere de aplicaciones de terceros, lo que garantiza la independencia y la posibilidad de configuración personalizada y escalable a las necesidades específicas de cada espacio que se quiera analizar.
Información analizada mediante inteligencia artificial
El proyecto piloto llevado a cabo durante dos meses en el campus de Teatinos de la UMA, que ha incluido también sensores de ruido, muestra los momentos en los que se produce una mayor afluencia de personas y vehículos en determinados puntos de manera clara.
Las conclusiones determinan que la mayoría de los miembros de la comunidad universitaria transitan por las mismas zonas en horarios similares, generando problemas de congestión. Además, la contaminación acústica supera los valores permitidos en ciertos momentos.
Colocado en lugares de interés, el sistema identifica los dispositivos que se encuentran en una zona concreta y analiza cómo se mueven dentro de la ciudad. Así, puede predecir cómo se trasladan las personas de un lugar a otro de manera habitual y establecer un mapa de desplazamientos lógicos.
La información captada por los sensores es analizada y evaluada mediante inteligencia artificial con un software que no requiere de ordenadores específicos. Con cualquier dispositivo común se obtiene el mapa sobre el que tomar decisiones. Al medir la velocidad de los transeúntes, el sistema también ofrece datos sobre el modo de desplazamiento -bicicleta, coche o a pie-.
Conocer dónde y en qué momentos existe una mayor afluencia en un espacio permite a los gestores tomar decisiones basadas en datos fiables a la hora de organizar las entradas y salidas de una zona, gestionar el consumo de energía, establecer direcciones en las calles, acomodar las vías según el medio de locomoción o controlar factores como el ruido.
Mejoras en el sistema
La investigación se ha financiado mediante el proyecto ‘Precog: Predicción Computacional Inteligente para Ciudades Andaluzas Inteligentes’ de la Consejería de Universidad, Investigación e Innovación de la Junta de Andalucía y el fondo FEDER de la Unión Europea.
El sistema está preparado para ser aplicado en otras zonas o espacios. Su diseño permite ampliar los sensores con nuevos componentes para evaluar otros indicadores, como los gases contaminantes, la temperatura y la humedad. En este sentido, los investigadores del equipo NEO continúan sus estudios para mejorar el sistema con el fin de abarcar zonas más amplias y obtener datos y predicciones de los métodos de aprendizaje automático, así como crear una aplicación en la que los usuarios puedan consultar la afluencia de personas en un lugar en tiempo real.