El Consejo de Ministros, a propuesta del Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital, aprobó el pasado martes el Proyecto Estratégico para la Recuperación y Transformación Económica de Microelectrónica y Semiconductores (PERTE Chip) en el marco del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia. Movilizará una inversión pública de 12.250 millones de euros hasta 2027, financiada con fondos europeos Next Generation, y activará la inversión privada para reforzar las capacidades de diseño y producción de chips en España desde una perspectiva integral y para favorecer la autonomía estratégica nacional y de la UE en este sector.
La escasez de semiconductores a escala mundial, desencadenada por los cuellos de botella en el suministro derivados de la pandemia, ha puesto de manifiesto la necesidad de acelerar la autonomía en la fabricación de chips en Europa.
España está bien posicionada en activos estratégicos como el desarrollo de arquitecturas alternativas como RISC-V, fotónica integrada o desarrollo de chips cuánticos. Además, el crecimiento de la demanda de semiconductores en sectores tractores como la automoción justifica las economías de escala necesarias para desarrollar estas actuaciones. Este incremento se acelerará en los próximos años y se sumarán otros ámbitos como las telecomunicaciones o el transporte ferroviario.
En este contexto, el PERTE Chip, en línea con lo previsto en la propuesta de Ley Europea de Chips, desplegará mecanismos de colaboración público-privada para promover las inversiones necesarias y se desarrollará de forma coordinada entre las administraciones públicas, la industria, las universidades y los centros de investigación.
Ejes estratégicos del PERTE Chip
El PERTE Chip se desarrollará en torno a cuatro ejes estratégicos que abarcan toda la cadena de valor de la industria en distintas fases. Se trata del refuerzo de la capacidad científica, con un presupuesto de 1.165 millones de euros para 2022-2027 para fortalecer la I+D+i sobre microprocesadores de vanguardia y arquitecturas alternativas y la fotónica integrada, desarrollar chips cuánticos y lanzar una línea de financiación para reforzar el Proyecto Importante de Interés Común Europeo (IPCEI) de Microelectrónica y Tecnologías de la Comunicación.
El segundo eje, dotado con 1.330 millones, incluye actuaciones que potenciarán la capacidad española en el diseño de microprocesadores mediante la creación de empresas fabless de diseño de microprocesadores de vanguardia y arquitecturas alternativas, líneas de pilotos de pruebas y una red de capacitación en materia de semiconductores. Un tercer pilar de construcción de plantas de fabricación, con 9.350 millones, dotará de capacidad de producción nacional de semiconductores en la fabricación de tecnología de vanguardia (por debajo de 5 nm) y de gama media (de más de 5 nm).
Por último, se contemplan actuaciones para la dinamización de la industria de fabricación TIC, tales como la creación de un fondo capital centrado en los chips para financiar start-ups, scale-ups y pymes innovadoras del sector; o fortalecer la producción interna de productos electrónicos, con una asignación total de 600 millones de euros.
Comisionado Especial para la gobernanza
Para asegurar la coordinación, efectividad y coherencia de las actuaciones, en las que participan varios ministerios, se ha articulado un sistema de gobernanza liderado por el recién creado Comisionado Especial para el PERTE Chip.
Entre sus funciones, figuran establecer un contacto permanente con la industria nacional y extranjera, valorar la viabilidad de los proyectos en coordinación con las comunidades autónomas y los municipios o ayudar a constituir las iniciativas empresariales en el marco de la Ley Europea de Chips.
La gobernanza se completa con una comisión interministerial, presidida por la vicepresidenta primera y ministra de Asuntos Económicos y Transformación Digital, y un grupo de expertos del mundo científico, académico y empresarial de referencia. El Comisionado estará dirigido por Jaime Martorell Suarez, experto en el sector de la Microelectrónica y de las Telecomunicaciones.