El programa Life-Diademe ha probado en las ciudades italianas de Roma, Piacenza y Rímini el funcionamiento de las redes de sensores para un control de la iluminación adaptativo que permita ahorrar energía, reducir las emisiones de CO2 y mejorar la seguridad. Debido a su contribución a la transición energética, el proyecto ha ganado el Premio de Energía Sostenible en la categoría de Innovación en el marco de la Semana de la Energía Sostenible de la UE.
La mayor parte de la energía de Europa es consumida por áreas urbanas, que también son el origen de la mayoría de las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI). Por su parte, el alumbrado público representa más del 50% del consumo de electricidad de la mayoría de los municipios europeos, por lo que ahorrar en este ámbito puede ayudar a alcanzar los objetivos climáticos establecidos en el Pacto Verde Europeo.
En este contexto, Life-Diademe nació en 2016 y se desarrolló hasta 2020 con la coordinación de Reverberi Enetec. Ha contado con un presupuesto total de 1.428.742 euros, de los que 812.400 euros han sido aportados por la Unión Europea a través del programa Life.
Su principal objetivo era lograr una reducción del consumo de energía del alumbrado público de un 30% en comparación con los sistemas existentes, además de fomentar la adopción de unidades de iluminación Life-Diademe en los años posteriores a la finalización del proyecto, reducir las emisiones de CO2 y los costes de mantenimiento, así como apoyar el cambio hacia prácticas de contratación pública sostenibles.
Tras probar su esquema de iluminación adaptativa en tiempo real en Roma, Piacenza y Rímini, el pasado mes de enero se presentaron los principales resultados, que superaron las cifras previstas.
Resultados de Life-Diademe
El equipo del proyecto evaluó los sistemas de control inteligente para el alumbrado público en tres ciudades piloto. Se proporcionó alumbrado adaptativo en función de la iluminación circundante, los flujos de tráfico y las condiciones meteorológicas, y se instalaron cerca de 1.000 dispositivos para medir la iluminación, el tráfico rodado, la contaminación, los niveles de ruido y las condiciones climáticas para la comunicación de datos.
En concreto, los dispositivos para medir la calidad del aire, construidos con sensores electroquímicos de bajo coste, detectan los niveles de NO2, O3, CO y NO, humedad, temperatura y presión atmosférica. Para un control final, los datos recopilados son comparados y mejorados con visión artificial LTM.
Después de meses de mejoras técnicas, especialmente en materia de costes y materiales adecuados para la detección de grandes cantidades de datos, comenzaron a verse los primeros resultados positivos. Se lograron reducciones de CO2 de casi un 41% frente a las tecnologías existentes hasta el momento, que utilizaban instalaciones de LED preprogramadas; y un 57% en comparación con los sistemas sin regulación LED full light.
En cuanto al alto valor añadido de los datos recabados, reside en su utilidad para promover la reducción del impacto ambiental en el entorno urbano y mejorar la seguridad vial; así como para la creación de sistemas de información que permitan a los organismos públicos brindar servicios innovadores para la ciudadanía y las empresas en un contexto de smart city.
Según los expertos, a largo plazo una iluminación adaptativa con 12.500 puntos de iluminación en una ciudad mediana de unos 100.000 habitantes podría evitar hasta 6.644 toneladas de emisiones de CO2 en 10 años frente a los sistemas LED full light o 3.740 en comparación con luminarias LED preprogramadas.
Esta cifra asciende a 40.000 toneladas para una ciudad más grande como Roma, con 2,9 millones de habitantes y más de 200.000 puntos de iluminación. En ambos casos, se estima que se puede esperar un retorno de la inversión en dos años y medio.
El enfoque del proyecto ofrece un coste bajo y alta precisión. Este último es un aspecto clave en la función de seguridad pública del alumbrado, ya que las ciudades se muestran reacias a implementar tecnologías de iluminación adaptativa por temor a atenuar la iluminación cuando las condiciones no son seguras.
Premio de Energía Sostenible en la categoría de Innovación
La Semana de la Energía Sostenible de la UE (EUSEW, por sus siglas en inglés) es un evento dedicado a las energías renovables y el uso eficiente de la energía en Europa organizado por la Comisión Europea, que celebró su edición de 2021 del 25 al 29 de octubre.
El lunes 25 de octubre se entregaron los Premios de Energía Sostenible en las categorías de Innovación, Compromiso, Mujer en Energía, Young Energy Trailblazer y Premio Ciudadano. Un jurado de expertos seleccionó a los ganadores en materia de Innovación y Compromiso, mientras que la ciudadanía europea eligió al resto mediante votación pública.
En el acto de entrega de galardones celebrado de manera virtual durante la EUSEW, el proyecto Life-Diademe fue el ganador en la categoría de Innovación. Esta iniciativa ha sido reconocida por su esquema de alumbrado público adaptativo, que consume menos energía, reduce las emisiones contaminantes y garantiza una visibilidad adecuada para peatones y vehículos. En esta categoría se valoran las actividades destacadas financiadas por la UE que muestran un camino innovador hacia la transición energética.
Los resultados de Life-Diademe tienen el potencial de generar impactos medioambientales y socioeconómicos significativos a nivel europeo y mundial. El proyecto podrá integrarse fácilmente en las estrategias de contratación pública ecológica y en futuros escenarios de ciudad inteligente, además de contribuir a la actualización de las políticas de mitigación y adaptación al cambio climático.