La ciudad de Huelva acoge la experiencia piloto a nivel mundial de Planta Solar Urbana (PSU) del Grupo TSO en el marco de la convocatoria europea Retos-Colaboración, que estrenará y probará su tecnología en 50 farolas con el objetivo de medir y publicar los resultados obtenidos para la última fase de su proyecto de I+D.
En la búsqueda de la solución al reto de desarrollar un dispositivo solar fotovoltaico integrado en el mobiliario urbano, especialmente en farolas, y conectado a la red para producir energía solar durante el día y verterla a la red de baja tensión con los beneficios de generar energía segura, eficiente y limpia en entornos urbanos, Grupo TSO registró en 2016 una patente mundial para desarrollar PSU integradas en mobiliario urbano para autoconsumo y puntos de recarga en ciudades.
En este contexto, nació el proyecto de I+D enmarcado en la convocatoria europea Retos-Colaboración de 2017. Esta convocatoria concedió al holding sevillano especializado en tecnología solar fotovoltaica un presupuesto de 621.972 euros para el desarrollo del primer prototipo de Planta Solar Urbana en el mundo y tres plantas piloto en el entorno urbano de Pamplona, Sevilla y Huelva.
Última fase del proyecto en Huelva
En la última fase del proyecto de I+D, 50 farolas de la prolongación de la avenida de Andalucía de Huelva estrenan la tecnología de la iniciativa a nivel mundial. De esta manera, la ciudad suma la PSU a las plantas solares de última generación que se están implantando en el territorio, en línea con su estrategia de transición energética.
Estas plantas solares urbanas, cuyos módulos solares están integrados en el mobiliario urbano e inyectan la energía generada directamente en baja tensión a la red urbana, permiten la integración de generación y consumo, como en el caso del autoconsumo en las propias ciudades o del consumo realizado por vehículos eléctricos en puntos de recarga en un entorno urbano.
El holding va a monitorizar los datos durante seis meses para cerrar la fase de investigación antes de iniciar la comercialización del producto. Según las estimaciones realizadas, cada dispositivo puede generar en un año la energía necesaria para ahorrar el CO2 que producen cuatro árboles.