El proyecto europeo CIRVE (Corredores Ibéricos de Infraestructura de Recarga Rápida de Vehículos Eléctricos), cuyos objetivos eran conectar la Península Ibérica con los países de la Unión Europea, la conexión de España con Francia y Portugal, y demostrar que la movilidad eléctrica permite viajar a lo largo de la península, ha concluido con éxito el despliegue de 40 puntos de recarga rápida de acceso público en localizaciones estratégicas de los corredores ibéricos y ha permitido demostrar la interoperabilidad.
La interoperabilidad, que permite que el usuario solo tenga que preocuparse de encontrar el cargador más próximo y que pueda usarlo independientemente de con quien tenga su contrato, ha sido el principal foco de trabajo del proyecto CIRVE. Se trata de un aspecto clave para el desarrollo del vehículo eléctrico y el reto es mayor cuando el objetivo es que cruce fronteras.
La iniciativa se ha desarrollado en los corredores Atlántico y Mediterráneo de España y Portugal para fomentar el uso de vehículos eléctricos entre estos dos países y Francia en un marco transfronterizo totalmente interoperable que permita a los conductores de vehículos eléctricos el tránsito desde el Norte de Europa hacia la Península Ibérica.
Los ocho socios de España, Portugal y Francia de CIRVE han sido Ibil, como líder del proyecto; EDP, Endesa X, GIC e Iberdrola, junto con la asociación empresarial para el Desarrollo e Impulso de la Movilidad Eléctrica (AEDIVE), Renault Group a través de su marca Mobilize y el Centro para la Excelencia e Innovación de Portugal (CEIIA).
La iniciativa, que dio comienzo en 2016, ha contado con un presupuesto de 3,5 millones de euros. Ha sido cofinanciado al 50% por la Unión Europea, a través de la convocatoria de 2015 del programa de financiación de la UE Connecting Europe Facility (CEF), y forma parte de la Red Transeuropea de Transporte (Trans-European Transport Networks o TEN-T), que persigue facilitar un modelo de negocio para instalar toda una malla de sistemas de recarga eléctrica en esta red. A través de este instrumento, la UE financia proyectos como los corredores de infraestructura de recarga rápida para vehículos eléctricos.
Viajar en vehículo eléctrico desde Portugal hasta Francia
CIRVE ha permitido desplegar una red interoperada de 40 cargadores de 50 kW ubicados estratégicamente en los corredores europeos a su paso por la Península Ibérica, además de estudiar la experiencia de despliegue y operación de dicha infraestructura para que este aprendizaje permita optimizar actuales y futuros despliegues masivos. En concreto, se han implantado 25 nuevos puntos de recarga rápida en España y se han adaptado otros 15 puntos que ya estaban en funcionamiento en determinadas localizaciones estratégicas de los corredores ibéricos.
La iniciativa ha conseguido demostrar que viajar desde Portugal hasta Francia cargando en las estaciones del proyecto es posible. La marca del Grupo Renault Mobilize ha sido la encargada de poner a prueba el corredor con el vehículo eléctrico Renault ZOE, viajando desde Lisboa (Portugal) a Irún, con un recorrido de casi 1.000 kilómetros recargando en 7 puntos estratégicos: Badajoz, Navalmoral de la Mata, Burgos, Vitoria, Eibar e Irún (frontera con Francia).
Entre las lecciones aprendidas en el proyecto, destaca que para que los vehículos eléctricos se conviertan en una pieza más del ecosistema del transporte, los usuarios deben tenerlo fácil y eso pasa por poner a su disposición cargadores allí donde los necesiten y con la tecnología que necesiten. Asimismo, se ha demostrado que la velocidad de despliegue se ve condicionada por las licencias. De esta manera, los resultados obtenidos aspiran a impulsar una movilidad más sostenible en la Unión Europea.