El Observatorio de Accesibilidad Universal en los municipios de España, presentado por Fundación ONCE, analiza la accesibilidad de calles, plazas y edificios públicos. Entre otras cosas, recoge que los cascos antiguos, las plazas de aparcamiento, aseos y cajeros son los espacios menos accesibles.
El Observatorio de Accesibilidad Universal ha sido impulsado por Fundación ONCE y desarrollado por Ilunion Tecnología y Accesibilidad, en colaboración con la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP), el Comité español de representantes de personas con discapacidad (CERMI) y el Real Patronato sobre Discapacidad. El documento analiza los obstáculos a los que se enfrentan cada día las personas con discapacidad en sus desplazamientos con el fin de ofrecer una visión clara de la situación y mostrar las cuestiones más relevantes sobre las que poner el foco de atención.
Este estudio cubre todas las provincias de España y municipios de diversos hábitats poblacionales, en los cuales se han valorado diferentes tipologías de itinerarios urbanos y de edificios municipales. En total, se han analizado 860 itinerarios y 840 edificios en 262 municipios con una población global de 16 millones de personas.
Itinerarios urbanos y edificios municipales
El trabajo de campo relativo al urbanismo identifica los cascos antiguos de los municipios como las áreas con menos índices de accesibilidad. Además, hasta en el 42% de los itinerarios analizados, el diseño de elementos como papeleras, contenedores y cajeros no es accesible para todas las personas. Sin embargo, existen índices positivos en materia de salvar desniveles.
En cuanto al entorno construido, los resultados muestran índices de accesibilidad reducidos. Los edificios de carácter social y sociosanitario presentan mejores cifras, mientras que la imposibilidad de hacer un uso normalizado de los aseos adaptados se observa en el 72% de los edificios.
Asimismo, el estudio revela que no es posible para todas las personas evacuar edificios en caso de emergencia en condiciones de seguridad y autonomía. Esto ocurre en el 91% de los ayuntamientos y sedes de concejalías, en el 86% de los edificios culturales y educativos, y en el 75% de los destinados a usos sociosanitarios.
En lo referente a los elementos de comunicación adecuados para su comprensión por todas las personas, solo el 14% de los itinerarios urbanos y el 3% de los edificios municipales analizados los presentan.
Movilidad y transporte público
El Observatorio de Accesibilidad Universal muestra que los pasos y vados peatonales inadecuadamente ejecutados y señalizados suponen un riesgo a la hora de cruzar la calle en el 60% de los itinerarios en cascos antiguos de municipios de menos de 20.000 habitantes y en el 61% de los situados en zonas rehabilitadas de localidades de más de 500.000 habitantes.
Además, se observa que el ancho libre de paso mejora significativamente en las zonas de nueva construcción. Igualmente, en los cascos antiguos de municipios de más de 500.000 habitantes el 94% de los itinerarios tiene carencias en la dotación y diseño de áreas de descanso para todas las personas. En las zonas nuevas de esas localidades hasta un 72% de las plazas de aparcamiento reservados para personas con movilidad reducida presenta carencias en dotación y diseño.
En el transporte público, los mayores niveles de accesibilidad en las paradas se encuentran en los cascos antiguos de municipios de hasta 50.000 habitantes y en las áreas de nueva construcción de localidades de menos de 20.000 habitantes.
El estudio también analiza la comunicación espacio-peatón. En las zonas nuevas de municipios de menos de 20.000 habitantes hasta el 70% de los vados peatonales carece de pavimentos contrastados en textura y color, y en los de más de 500.000 el 83% de los semáforos ubicados en zonas urbanas rehabilitadas no posee avisador acústico.
Por último, el uso de edificios muestra que un 83% de los aseos adaptados presenta barreras para personas con discapacidad en los edificios administrativos de localidades de entre 100.000 y 500.000 habitantes. Además, en las de más de 500.000 un 60% de los edificios sociosanitarios no permite cambiar de nivel o el desplazamiento entre sus plantas a todas las personas por carencias en escaleras y ascensores.
Así, la señalización y el diseño de escaleras suponen importantes barreras de uso para gran parte de la ciudadanía en todas las tipologías de edificios y de hábitat poblacional analizadas.
Avances desde 2011
El Observatorio de Accesibilidad Universal en los municipios de España amplía y actualiza los diagnósticos previos realizados por Fundación ONCE en 2011. Según la organización, desde entonces se observan avances comedidos.
«Herramientas como las actividades de información, las campañas de toma de conciencia y las acciones formativas juegan un papel clave en la promoción de la igualdad de oportunidades y la no discriminación», señala Fundación ONCE en un comunicado.
En este sentido, concluyen que la adopción de estrategias en materia de accesibilidad en las primeras fases de los proyectos evita costes de readaptación y apoya la transición hacia espacios aptos para ser usados por todas las personas en condiciones de igualdad, seguridad y autonomía.