El Centro de Simulación Computacional (CCS) de la Universidad Politécnica de Madrid (UPM), a través del Grupo de Investigación en Información y Computación Cuántica (GIIC) de la Escuela Técnica Superior de Ingenieros Informáticos, y en colaboración con Telefónica y el Instituto IMDEA Software (REDIMadrid), coordina la nueva red de comunicación cuántica de Madrid. Se denomina MadQCI (Madrid Quantum Communication Infraestructure) y ya tiene operativa la primera fase de su despliegue, en la que se están desarrollando tecnologías quantum-safe.
MadQCI, una infraestructura que integra las comunicaciones cuánticas en redes ópticas convencionales y que forma parte de la iniciativa europea OpenQKD, está desarrollando en su primera fase de despliegue tecnologías de seguridad quantum-safe. Asimismo, la red se usará para industrializar las tecnologías desarrolladas en proyectos como CiViQ, perteneciente al programa europeo Quantum Flagship, cuyo objetivo es liderar la nueva generación de tecnologías cuánticas.
Los algoritmos cuánticos que se están investigando servirán para aumentar la seguridad de aplicaciones críticas en campos como las telecomunicaciones, la atención médica, el suministro de electricidad y los servicios públicos.
El primer despliegue finalizará antes de verano
Entre las tecnologías cuánticas, la Distribución Cuántica de Claves (QKD, por sus siglas en inglés Quantum Key Distribution) es una de las más avanzadas, según Vicente Martín Ayuso, investigador responsable del GIICC y director del Centro de Simulación Computacional de la UPM. Se trata de una forma de cifrado que permite la transmisión de datos con un alto nivel de seguridad, que soluciona el problema de la vulnerabilidad de la seguridad en las comunicaciones frente a cualquier tipo de ordenador, incluidos los cuánticos.
La UPM realizó los primeros prototipos de una red cuántica en Madrid hace más de 10 años, en colaboración con Telefónica y, en 2018, demostró la aplicación de criptografía cuántica en redes ópticas comerciales y su integración con la operación de la red. “La capacidad de usar tecnologías como SDN, diseñadas para incrementar la flexibilidad de la red, junto con nuevas tecnologías de QKD es lo que nos permite hacer converger las redes clásicas y cuánticas en la infraestructura de fibra óptica existente”, señala Martín Ayuso.
La red MadQCI, que se ha desarrollado como parte del proyecto europeo OpenQKD, cuenta ya con 16 dispositivos de comunicaciones cuánticas, de los cuales 10 ya han sido desplegados y otros 6 están en pruebas de laboratorio. Otros 6 se añadirán antes del verano, cuando se espera finalizar el primer despliegue en Madrid.
Esta iniciativa se alinea con la estrategia de la Unión Europea para fomentar la cooperación entre la investigación, la industria y el sector público a fin de crear un ecosistema innovador que abra una nueva perspectiva para una Europa digital segura, y construir así las bases para la próxima generación de las tecnologías de comunicación.