Desde la irrupción de la COVID-19, los sistemas inteligentes de conteo de Lector Vision han registrado cambios significativos en el comportamiento del tráfico, en línea con la publicación de nuevas medidas por parte de los gobiernos y ciudades para mitigar los efectos de la pandemia.
La recopilación y el análisis de los datos de tráfico es fundamental para el control y la gestión de las vías de circulación. Así, los equipos de tráfico inteligentes como las cámaras de Reconocimiento Automático de Matrículas (ANPR, por sus siglas en inglés Automatic number-plate recognition) de Lector Vision resultan un soporte clave para tomar decisiones inteligentes y avanzar hacia el objetivo de una movilidad automatizada, cooperativa y conectada.
Como resultado, se reducirá la congestión del tráfico, la cifra de accidentes y las emisiones contaminantes, proporcionando a la ciudadanía una mejor experiencia de movilidad en un entorno con menos contaminación.
La pandemia ha influido notablemente en los patrones mundiales de movilidad, sobre todo en lo que a flujos de tráfico se refiere. El inicio de esta situación excepcional con la confirmación de los primeros casos desencadenó considerables variaciones en comparación con los patrones hasta entonces habituales, tal y como han registrado los sistemas inteligentes de conteo de Lector Vision.
Movilidad durante la pandemia
Al comienzo de la pandemia, el portal de datos abiertos del Ayuntamiento de Madrid muestra un ligero aumento en el flujo de vehículos debido a que la ciudadanía empezó a comprar y almacenar productos de primera necesidad. En las siguientes semanas, con la propagación del virus, se observa una caída del 70% del tráfico en hora punta.
Más tarde, una vez iniciada la desescalada, se muestra un ligero aumento del 20% por la reapertura progresiva de empresas, hostelería y tiendas. Mientras que actualmente la tendencia se acerca progresivamente a la normalidad habitual.