El centro de ciencia y conocimiento de la Comisión Europea, Joint Research Centre (JRC), ha publicado un informe sobre políticas y habilidades necesarias para una sociedad digital más segura, titulado ‘Ciberseguridad: nuestra ancla digital. Una perspectiva europea’. El documento analiza el ámbito de la ciberseguridad en los últimos 40 años e identifica dónde podría mejorar la UE en beneficio de las empresas y la ciudadanía.
Las tecnologías digitales contribuyen a mejorar la calidad de vida de la ciudadanía, pero también pueden hacer más vulnerable a la población a través de los ciberataques. En este contexto, el Joint Research Centre ha publicado el informe ‘Ciberseguridad: nuestra ancla digital. Una perspectiva europea’.
Este documento recomienda políticas para fomentar una cultura de ciberseguridad, y habilidades y conocimientos para equipar a la sociedad europea.
Claves del informe
Entre los puntos clave del informe, se presenta la ciberseguridad como una necesidad para la sociedad digital. Debido a la situación generada por el COVID-19 a nivel mundial, se han producido cambios que han acelerado la digitalización de la sociedad -teletrabajo, servicios online, etc.- convirtiendo la seguridad cibernética en uno de los focos imprescindibles para la estabilidad en la Unión Europea.
En el actual avance hacia una sociedad interconectada, el informe también señala la necesidad de un cambio de paradigma para configurar la ciberseguridad desde el comienzo de cualquier nuevo servicio digital, con nuevos enfoques basados en la resiliencia y la adaptabilidad. Todo esto debe conseguirse con un esfuerzo colectivo, desde el usuario que usa un dispositivo digital, hasta el responsable de la formulación de políticas que da forma a la normativa digital.
Asimismo, el informe indica que las tecnologías emergentes, como inteligencia artificial o blockchain, implican la transformación digital del sector industrial, por lo que las políticas de ciberseguridad deben ser interoperables en todos los sectores.
Por último, el JRC describe la ciberseguridad como un pilar de la soberanía europea de cara al futuro, por lo que una UE con una fuerte cultura y tecnología en este ámbito es indispensable.