La Generalitat Valenciana ha sacado a licitación el contrato mixto de suministro y puesta en servicio para la renovación tecnológica de la red de transporte y difusión del múltiple digital autonómico (MAUT) de la comunidad para mejorar la calidad de la emisión y su fiabilidad. El plazo para presentar ofertas finaliza el 2 de marzo de 2020.
Con la finalidad de cumplir la normativa vigente y prestar el servicio de TDT en las condiciones exigidas, la consejería de Hacienda y Modelo Económico, a través de la dirección general de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (DGTIC), ha sacado a licitación el nuevo contrato para la renovación de la red propia.
La red de la Comunidad Valenciana permite la difusión del múltiple digital autonómico, por el que se transmite la señal de los canales públicos À Punt, À Punt HD y À Punt Ràdio, y de los privados 8 Mediterráneo y BOM Cine.
De esta manera, el contrato -para el que se pueden presentar ofertas hasta el próximo 2 de marzo- contempla la desinstalación del equipamiento sustituido, así como el suministro, instalación y puesta en servicio de equipamiento para la renovación tecnológica de la red, y la prestación de un servicio de garantía. Incluye el suministro de hardware y software de los subsistemas de difusión y distribución del MAUT, servicios de formación del personal de la Generalitat sobre el nuevo equipamiento, soporte directo de los fabricantes que lo suministran y la documentación asociada a las instalaciones realizadas.
El contrato, a ejecutar en 12 meses, cuenta con un presupuesto de unos 2.476.000 euros.
Plan Técnico Nacional de TDT
Debido al Real Decreto referente al Plan Técnico Nacional de TDT aprobado por el Gobierno de España el pasado 2019, los prestadores de servicio público de comunicación audiovisual televisiva de cobertura autonómica deberán alcanzar una cobertura de al menos el 98% de la población de MAUT antes del próximo 1 de junio.
En la actualidad, la red valenciana se encuentra obsoleta funcional y tecnológicamente. Así, se requiere la sustitución y renovación con equipos de última generación que permitan mejorar la operatividad, las prestaciones y la fiabilidad de la red, además de reducir el consumo eléctrico de los centros emisores y reemisores.