El estudio Digital Readiness Index 2019, elaborado por la empresa de telecomunicaciones Cisco, evalúa la preparación digital de 141 países de todo el mundo. El informe analiza siete indicadores y clasifica cada país en cuatro etapas en función de su puntuación, de menor a mayor: Activate, Accelerate Low, Accelerate High y Amplify.
El índice Digital Readiness Index 2019 sitúa a España en el puesto número 26 con 15,74 puntos sobre 25, por encima de la media global (11,95) y lo que equivale a la etapa ‘Accelerate High’. Singapur se pone en primera posición con 20,26 puntos, le siguen Luxemburgo (19,54) y Estados Unidos (19,03). La peor puntuación global corresponde a Chad con 4,32 puntos.
Otro dato clave que arroja el estudio es que Dinamarca, Países Bajos, Suiza, Islandia y Singapur son los cinco primeros países en infraestructura tecnológica. Por otro lado, se aprecia una clara brecha digital en Europa: los países del norte y de la zona occidental tienen una puntuación mucho más alta que los del este y el sur del continente.
Aunque el informe mide la infraestructura tecnológica, la tecnología por sí sola no es suficiente. En este sentido, también analiza las necesidades humanas y básicas, el desarrollo de habilidades, entornos empresariales favorables y de start-ups, así como inversiones públicas y privadas en innovación.
Metodología del estudio
Las puntuaciones se determinan en base a siete dimensiones analizadas, factores clave en la preparación digital de un país: necesidades básicas, capital humano, infraestructura tecnológica, facilidad para hacer negocios, inversión empresarial pública y privada, adopción tecnológica y entorno de start-ups.
Las dimensiones más importantes para la preparación digital son las tres primeras, pues las mejoras en estos ámbitos suelen tener un mayor impacto. Concretamente, el capital humano es esencial en todas las etapas de preparación digital para crear una fuerza laboral capaz de crear y utilizar tecnología, además de desarrollar habilidades en áreas emergentes. Asimismo, el informe desvela una fuerte correlación entre la preparación digital y otros indicadores de desempeño, como por ejemplo el PIB.
Con respecto a los siete indicadores, el informe coloca a cada país en una etapa. Aquellos Estados con menos puntuación se encuentran en ‘Activate’, que se beneficiarán principalmente de mejoras en necesidades básicas y desarrollo de capital humano. Por su parte, los países más avanzados -en la etapa ‘Amplify’- obtienen una buena puntuación en necesidades básicas y en facilidad para hacer negocios y deben seguir interviniendo en esas dimensiones para mantener su posición.