El servicio de conservación de carreteras de la provincia de Vizcaya, dependiente de la Diputación Foral, ha incorporado el uso de imágenes de satélite y drones para vigilar el deslizamiento de laderas y taludes que puedan afectar a la red de carreteras.
La vigilancia mediante satélite y con drones se centra en las áreas susceptibles de deslizamientos de tierra o caídas. Para realizar el control y seguimiento, la tecnología satelital permite acceder a información sobre zonas de difícil acceso o en las que sería inviable realizar estudios in situ. Las imágenes captadas pueden cubrir grandes áreas y ser comparadas con imágenes anteriores usando técnicas de big data, identificando así cualquier desplazamiento con precisión.
Por su parte, la utilización de drones permite obtener fotografías y filmaciones aéreas de alta definición, así como el modelizado del terreno en 3D. Con las imágenes multiespectrales es posible obtener cartografías de diferentes parámetros asociados al estado de la tierra, para obtener de esta manera datos relevantes en poco tiempo y en áreas de difícil acceso.
Seguridad de las carreteras
Este 2020, el departamento de Infraestructuras y Desarrollo Territorial de Vizcaya ha destinado un presupuesto de 299.362 euros al programa de control y seguimiento de taludes y 193.600 euros al plan de vigilancia de laderas.
Así, este año el control satelital y el uso de drones complementan el inventario foral que recoge información detallada sobre 1.195 taludes y que sirve de ayuda en la vigilancia de deslizamientos. Para determinar en cuáles actuar, la Diputación de Vizcaya realiza un control sistemático de estos elementos, manteniendo actualizado su registro.
Asimismo, se hace un seguimiento de las laderas que puedan deslizarse, representando un riesgo para los usuarios de la red de carreteras. En el último año, la diputación provincial ha estudiado la propensión del terreno a deslizamientos, resultando 35 áreas de alta susceptibilidad.