El proyecto ‘Autonomous Ready’ incorpora un sistema de ayuda a la conducción en vehículos de motor de la ciudad de Barcelona. El objetivo es reducir los accidentes y detectar los puntos negros de la urbe. Hasta ahora, ha evitado 668 siniestros en tan solo dos meses.
Un total de 300 vehículos de reparto y transportes, entre los que se encuentran 85 autobuses de Transportes Metropolitanos de Barcelona (TMB), han circulado durante un período de prueba de dos meses equipados con dispositivos de asistencia a la conducción (Advanced Driver Assistance Systems, ADAS).
De esta manera, el sistema predice el 80% de los posibles errores del conductor gracias a las cámaras con sensores inteligentes integradas en los vehículos. Así, recogen información del entorno, detectan y geoposicionan a peatones y ciclistas, cartografían zonas sensibles para implementar medidas de seguridad y emiten una alerta de accidente en casos de peligro.
En este tiempo, los vehículos han recorrido 45.000 kilómetros diarios y han detectado 37.000 ciclistas y 240.000 peatones, de los que 668 se encontraban en situación de riesgo.
Objetivos de la iniciativa
‘Autonomous Ready’ está coordinado por la Dirección General de Tráfico (DGT) y el Ayuntamiento de Barcelona, con la colaboración de entidades y empresas que han incorporado el dispositivo tecnológico de seguridad a su flota de vehículos.
El objetivo es ampliar de 300 a 5.000 vehículos la flota segura en un plazo de tres años. La normativa de la Unión Europea prevé que para 2022 sea obligatorio que todos los vehículos incorporen estas tecnologías de asistencia a la conducción para mejorar la seguridad vial.