La Comisión Europea presentó ayer el Pacto Verde Europeo, una hoja de ruta que recoge una serie de actuaciones en todos los sectores de la economía. Especialmente, en las TIC, transporte, energía, edificios, industrias, textiles, productos químicos, cemento y agricultura.
La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, y el vicepresidente ejecutivo, Frans Timmermans, presentaron este miércoles el acuerdo para afrontar los retos del clima y el medio ambiente. Señalaron que se trata de un mecanismo para una transición justa, es decir, en el que se tendrá en cuenta que no todos los Estados miembros parten de la misma situación y que hay regiones que dependen en gran medida de actividades con un intensivo uso de carbono.
Los principales objetivos establecidos por el Pacto Verde Europeo son la transición a una economía circular y limpia a través del impulso del uso eficiente de los recursos, paralizar el cambio climático, reducir la contaminación mediante una política de polución cero, así como revertir la pérdida de biodiversidad.
Como un primer paso y para materializar la ambición de la UE de llegar a ser un continente climáticamente neutro para el año 2050, la Comisión presentará la ‘Ley del Clima Europea’ en un plazo de 100 días. Además, está previsto que en marzo de 2020, la Comisión ponga en marcha el ‘Pacto por el Clima’ para dar voz a los ciudadanos en el diseño de acciones y soluciones.
También se empezarán a desarrollar estrategias en torno a la biodiversidad, la industria, la alimentación sostenible, la contaminación, así como el plan de acción sobre economía circular.
Hacia una movilidad más sostenible
En el ámbito de la movilidad sostenible, el Pacto Verde busca reducir en un 90% las emisiones para el año 2050. En este sentido, planea una digitalización, con la automatización de la movilidad, sistemas inteligentes de gestión del tráfico, así como Apps para lograr hacer del transporte un sector más limpio y eficiente. Además, marca como objetivos la reducción de las emisiones del transporte aéreo y marítimo, acabar con las subvenciones destinadas a los combustibles fósiles y un sistema efectivo de pago en carreteras de la UE.
Para impulsar los medios de transporte sostenibles, se instalarán un millón de puntos y estaciones de recarga para dar servicio a los 13 millones de vehículos cero y bajas emisiones que se prevé estén operativos para 2025. En consecuencia, se endurecerán los objetivos de emisiones de Europa para 2030 y se fijará el camino a seguir de cara al 2050.
Financiación
Para conseguir los objetivos marcados en materia de clima y energía para 2030, la Comisión Europea calcula que será necesaria una inversión adicional de 260.000 millones de euros al año, lo que equivale al 1,5% del PIB de 2018. Para ello, la Comisión presentará a inicios de 2020 el Plan de Inversiones para una Europa Sostenible.
Como mínimo, el 25% del presupuesto de la UE a largo plazo deberá dedicarse a la lucha contra el cambio climático, para lo que el Banco Europeo de Inversiones ofrecerá apoyo adicional.
Asimismo, la Comisión presentará la Estrategia de Financiación Ecológica en 2020, con la finalidad de que el sector privado contribuya a financiar la transición ecológica.