European Data Portal ha publicado su informe Open Data Maturity Report correspondiente a 2019, que mide el desarrollo alcanzado en el ámbito de los datos abiertos en la Unión Europea. Por quinto año consecutivo, España se sitúa entre los primeros países de la clasificación, concretamente en el segundo puesto.
Según el informe, el promedio de madurez de datos abiertos de la UE es del 66%, un punto por encima de la cifra obtenida en el período anterior. Por su parte, España ha conseguido una puntuación del 90%, tres puntos más que en 2018, por encima de la media europea y solo por detrás de Irlanda (91%).
Asimismo, España entra en el denominado grupo de prescriptores o trend setters, completado por Irlanda y Francia -en primer y tercer lugar, respectivamente-. Tres países a los que se les reconoce su estrategia avanzada de datos abiertos y su compromiso con esta práctica como activo estratégico para fomentar la transformación digital.
En 2018, el grupo de prescriptores se componía de cinco países, pero solamente estos tres han permanecido en la lista este año, pues han mejorado su puntación para continuar siendo líderes en datos abiertos.
De acuerdo con el estudio, de manera generalizada Europa se encuentra en una fase de consolidación, que ha pasado a centrarse en la calidad de los datos publicados, en lugar de en la cantidad.
El caso de España
Para realizar el informe, el European Data Portal se ha basado en cuatro indicadores clave: política, portal, impacto y calidad. De estos, la mejora de España se ha visto impulsada por las dimensiones de ‘impacto’ y ‘portal’.
En la dimensión ‘impacto’, el país mediterráneo ha obtenido un 100%. Para otorgarle esta puntuación, se ha valorado la existencia de metodologías para monitorear y medir la reutilización y el impacto de los datos abiertos.
En cuanto a ‘portal’, España ha experimentado un incremento de un 78% a un 89% en tan solo un año. Esta dimensión pone el foco en el nivel de madurez de las plataformas de datos abiertos estatales. Para ello, se ha analizado la funcionalidad, el uso, la variedad de datos y el enfoque del que se hace uso para asegurar la sostenibilidad de la plataforma.
Así, el informe concluye con una serie de recomendaciones para que los países europeos continúen avanzando en materia de datos abiertos. Entre otras conclusiones, proponen el fomento de ecosistemas de datos temáticos, el impulso de datos en tiempo real, la mejora de la calidad de los metadatos y datos mediante herramientas, el trabajo conjunto con instituciones académicas para ofrecer formación sobre el tema e involucrar a universidades e instituciones de investigación para desarrollar métricas específicas del país para medir el impacto.