El Banco Europeo de Inversiones (BEI) ha acordado una nueva política de préstamos para la energía. El objetivo es acabar con la financiación de proyectos energéticos basados en combustibles fósiles -incluido el gas- desde finales de 2021 en adelante.
Las futuras financiaciones permitirán acelerar la innovación en materia de energías limpias, eficiencia energética y energías renovables, con la movilización de un billón de euros de inversión para la sostenibilidad medioambiental durante la década de 2021 a 2030.
La nueva política de préstamos detalla los cinco principios que a partir de 2021 regirán la intervención del BEI en el sector de la energía: movilidad eléctrica, producción descentralizada de energía y almacenamiento innovador de la misma; eficiencia energética, descarbonización energética, redes esenciales para las nuevas fuentes de energía y refuerzo de las interconexiones transfronterizas, así como transformación energética fuera de la Unión Europea.
Estrategia de acción por el clima y sostenibilidad medioambiental
El BEI ha establecido una nueva norma de emisiones de 250 g de CO2 por kilovatio/hora (KwH), lo que sustituirá la norma actual de 550 g de CO2/KwH.
Enmarcados en la nueva estrategia de acción por el clima y sostenibilidad medioambiental, hay tres elementos fundamentales. En primer lugar, el objetivo de movilizar un billón de euros de inversiones en acciones climáticas y sostenibilidad ambiental en la década 2021-2030. En segundo lugar, el aumento gradual de parte de la financiación del BEI dedicada a la acción climática y la sostenibilidad ambiental para alcanzar el 50% de sus operaciones desde 2025 y en adelante. Y finalmente, la alineación de todas sus actividades de financiación con los principios y objetivos del Acuerdo de París para finales de 2020.
Desde 2012, el BEI ha proporcionado 150.000 millones de euros de financiación para apoyar proyectos que reducen las emisiones y ayudan a los países a adaptarse a los efectos del cambio climático.