El Bus Eléctrico Inteligente (BEI) de Vitoria ha circulado por primera vez por sus calles, si bien solamente para darse a conocer entre los vecinos de la ciudad, ya que no prestará servicio hasta 2020. Con motivo del acto de presentación de este sistema de transporte urbano, el BEI arrancó en las instalaciones de Tuvisa, el servicio de autobuses de la ciudad recogió a periodistas y autoridades en el Palacio Europa y terminó su ruta en la plaza de los Celedones de Oro, donde ha estado expuesto dos días.
Las obras del espacio público para implantar el BEI arrancarán durante la segunda quincena de agosto para que el año que viene los 13 autobuses eléctricos que conformarán el servicio estén cubriendo sus rutas. Este transporte recorrerá un trazado de 10 kilómetros y 24 paradas por sentido que permitirán conectar 14 barrios de Vitoria con una frecuencia de ocho minutos por cada vehículo. Circulará por carriles exclusivos en gran parte del recorrido y unirá puntos clave de la ciudad como el Gobierno Vasco, el Hospital Universitario de Araba o Mendizorrotza.
El autobús eléctrico que se ha dado a conocer en la ciudad es el modelo «ieTram» de Irizar e-mobility, empresa que, junto con Yarritu y LKS, forman la UTE con la que el Ayuntamiento de Vitoria firmó el pasado mes de mayo el contrato de implantación del BEI, que supondrá una inversión de casi 35 millones de euros. El Gobierno Vasco financiará el 65% del importe del proyecto y tanto la Diputación provincial como el Ayuntamiento de Vitoria aportarán un 17,5% cada uno.
Información en tiempo real y sistema de guiado automático
Los autobuses dispondrán de tres pantallas led para que los usuarios y usuarias puedan obtener información relativa a la ruta, las correspondencias, los tiempos de espera, la siguiente parada, etc. También existirán cargadores USB para los pasajeros, así como, en el caso de los articulados, una jaula para maletas.
En cuanto a la consola del personal conductor, proporcionará información en tiempo real sobre la ruta, los apartados técnicos del autobús o posibles incidencias, además de hacer más cómodo el control del autobús. De la misma forma, tendrán un sistema de guiado automático y de asistencia al conductor de aproximación a parada, minimizando la distancia entre bordillo y vehículo. Los espejos retrovisores, además, serán cámaras y no espejos.
En el ámbito de las paradas, las marquesinas serán parecidas a la del tranvía, con estética moderna, información multimedia actualizada a tiempo real, canceladoras y expendedoras de billetes. La implantación del Bus Eléctrico Inteligente vendrá también acompañada de diferentes intervenciones en el ámbito del espacio público.
Recarga eléctrica lenta y de oportunidad mediante pantógrafos
Aunque la configuración definitiva, el diseño de los nuevos autobuses y otros detalles se están definiendo todavía, los nuevos equipos contarán con capacidad mínima para 65 personas (21 de ellas sentadas) en el caso de los pequeños, mientras que los articulados darán servicio a un mínimo de 100 personas (30 sentadas). También incorporarán tres espacios para sillas de ruedas y, los articulados, un hueco extra para carritos.
La recarga eléctrica de los autobuses se realizará en siete cargadores inteligentes en cocheras y en dos estaciones de carga de oportunidad interoperables mediante pantógrafo en dos puntos del recorrido, en la parada de Mendizorrotza y en la parada de El Boulevard, que permitirá cargar los autobuses durante su recorrido en 4 minutos.
“El BEI va a suponer una auténtica revolución en Vitoria-Gasteiz y nos va a permitir convertirnos en un referente europeo en movilidad sostenible al mismo tiempo que mejoramos nuestra movilidad interna y aumentamos la calidad de vida de la ciudadanía», ha destacado el alcalde de la ciudad, Gorka Urtaran, durante el acto de presentación de este transporte que, para la consejera de Desarrollo Económico e Infraestructuras del Gobierno Vasco, Arantxa Tapia, es «una experiencia de éxito que se prevé extender progresivamente en todo Euskadi».