Cargadores de bicis eléctricas, el sistema de riego y el alumbrado público del parque de Morvedre, en la ciudad de Valencia, se sirven de la energía renovable producida por pérgolas fotovoltaicas. Se espera que las pérgolas, con una potencia instalada de 5,5 kW, produzcan 5.386,79 kWh al año y eviten la emisión de 2,4 toneladas de CO2 al año.
Cuenta con un gestor energético destinado a monitorizar instalaciones fotovoltaicas de autoconsumo instantáneo y dispone de un registrador de datos (datalogger) y servidor web con un software incorporado. Este equipo permite conocer, en tiempo real, la producción fotovoltaica, el ahorro energético, los consumos de la instalación, etc., además de almacenar datos históricos para hacer análisis periódicos.
No sólo ofrecen suministro eléctrico con energía renovable, las pérgolas dan sombra a las dos zonas de gradas situadas en el jardín donde se encuentra el ágora utilizada por el vecindario.
Preocupación ciudadana por la sostenibilidad
El equipo técnico del Ayuntamiento de Valencia, encargado de la supervisión de la obra, ha visitado la instalación, cuyo presupuesto de licitación ascendió a 109.999 euros, y su plazo de ejecución ha durado tres meses y medio. En esta visita, el alcalde de la ciudad, Joan Ribó, ha acompañado al concejal de Gobierno Interior, Sergi Campillo, y a la edil de Medio Ambiente, Pilar Soriano.
Ribó ha señalado que esta instalación es “el resultado de la preocupación ciudadana por la sostenibilidad, que en este proyecto se conjuga con todo el trabajo que se ha hecho en materia de iluminación en la ampliación de la zona ajardinada”.