Los puentes de los tres principales ríos que se cruzan en Andorra La Vella (Principado de Andorra) dispone de estaciones que monitorizan permanentemente el caudal que fluye, para advertir del riesgo de inundaciones. Es un sistema basado en Internet de las Cosas (IoT) desarrollado por la empresa Envira IoT.
Las ocho estaciones remotas y autónomas disponen de «dataloggers», pequeños dispositivos que leen los datos de nivel del agua temperatura y humedad que han sido recogidos por los sensores. Cuando las estaciones detectan que se supera un determinado nivel de agua, que se ha definido de forma independiente para cada una de ellas, generan una alerta que es enviada a un teléfono móvil y provocan una llamada de emergencia al centro de control al que están conectadas en tiempo real.
Alertas por caudal
Las alarmas no se general por nivel de agua, sino por caudal, según informa Envira IoT, ya los sensores miden la altura del río y, en función de la sección en la que se encuentren, se obtiene una fórmula matemática que convierte el nivel en caudal y velocidad. En el momento en que una estación detecta que se ha superado el límite de caudal determinado para ella, envía una alerta de crecida del río a través de SMS o correo electrónico a una serie de usuarios del sistema con el nivel alcanzado y el gráfico correspondiente.
Además, los usuarios disponen de una plataforma web donde se les informa de la evolución de los niveles, caudales y velocidades. Cuando el centro de emergencias recibe una alerta, puede conectarse a la plataforma y observar la evolución de las avenidas de agua. Los datos se envían al centro cada quince minutos, pero las estaciones adquieren valores cada cinco, por eso cada cuarto de hora remiten tres valores, a no ser que se produzca una alarma, en cuyo caso la comunicación será inmediata.