Un pequeño municipio de Castellón, Morella, se va a convertir a lo largo de los próximos seis meses en una ‘cashless city’, o lo que es lo mismo, un núcleo urbano en el que las compras y las ventas se hacen mediante pagos digitales. Es el objetivo del proyecto puesto en marcha por CaixaBank, el Ayuntamiento de Morella y Visa.
Para conseguirlo se pondrán en marcha toda una batería de incentivos y recompensas para promover y difundir el uso de móviles, tarjetas y otros medios de pago, como wearables, para pagar en los comercios de la población. Los vecinos podrán pagar sus compras sin dinero físico en todo tipo de sectores, incluidos los pagos en las máquinas de vending, el pago digital de las tasas públicas, los accesos a museos, la entrada al castillo de Morella y para el transporte interurbano.
Incentivos al pago ‘cashless’
Con el fin de incentivar a los comercios y a los consumidores a utilizar sus medios de pago digitales, CaixaBank contribuirá con cada compra que los ciudadanos efectúen con tarjeta, móvil u otro medio de pago digital en los comercios de Morella con una donación de 50 céntimos a una iniciativa social local por la se reunirá el dinero necesario para adquirir un vehículo adaptado para personas con movilidad reducida.
Además, los titulares de las tarjetas de CaixaBank participarán en sorteos y tendrán una bonificación de un 2% del importe de las compras realizadas cada mes en esta población. Otra de las iniciativas de “Morella Cashless City” es la creación de una tarjeta exclusiva, emitida por CaixaBank, con la imagen más emblemática de la población: el castillo de Morella.
Pagos digitales, modalidad poco extendida en España
Cualquier persona podrá solicitar la tarjeta Visa, que se le entregará de forma inmediata, para utilizarla en sus compras. Los usuarios podrán elegir la modalidad de pago que prefieren: débito o débito diferido (que pueden solicitar en la oficina de CaixaBank en Morella) o prepago (que además, estarán disponibles en distintos puntos de la ciudad). Igualmente, las tarjetas se podrán descargar en el teléfono móvil para realizar pagos con el terminal.
«La innovación digital tiene mucho que aportar al pequeño comercio y a las pymes», declaró el director territorial de CaixaBank en la Comunidad Valenciana, Xicu Costa, durante el acto de presentación del proyecto, del que también participó el presidente de la Generalitat valenciana, Ximo Puig. «Esta iniciativa se adelanta a lo que ya es una realidad en algunos países como Suecia en materia de transacciones económicas sin dinero en metálico y ayuda de forma decidida a evitar la exclusión financiera que se cierne sobre pequeños municipios del interior», destacó Puig.
Según datos del Banco de España, las operaciones con tarjeta crecieron un 12,6% en 2017 respecto al año anterior y alcanzaron un importe total de 135.246 millones de euros. Sin embargo, los índices de pago digital en España (24,2%) se encuentran todavía lejos de las experiencias cashless más avanzadas de Europa. Por ejemplo, en Suecia, según datos del banco central del país, el 85% de las compras se pagaron con tarjeta en 2016 y dos de cada tres consumidores aseguran que nunca utilizan el efectivo.