Uno de los servicios públicos fundamentales para el funcionamiento de una ciudad y su sostenibilidad ambiental es la recogida de basura que, con la llegada de las nuevas tecnologías a la gestión municipal, va a cambiar en los próximos años. Sobre cómo evolucionará el servicio y las aplicaciones tecnológicas en la gestión de residuos hablamos con Carlos Bernad, Presidente de Envac Iberia, compañía precursora de los sistemas de recogida neumática de desechos.
ESMARTCITY: Desde su experiencia, ¿cuáles son las principales carencias que presenta actualmente un servicio básico de la ciudad como la recogida y transporte de basura doméstica?
Carlos Bernad: Fundamentalmente, la falta de evolución del servicio en muchas ciudades. Hemos sustituido la fuerza motriz de los caballos por los motores diésel o de gas, incluso combustibles menos contaminantes, en los camiones, pero en esencia el procedimiento sigue siendo el mismo. Contenedores, muchas veces desbordados en las calles, y los camiones que recorren constantemente las vías públicas para recoger y transportar los desechos a las plantas de tratamiento. Todo ello genera incomodidades para el ciudadano y perjuicios para el medio ambiente, hacen las ciudades poco higiénicas y habitables.
ESMARTCITY: Envac ha sido pionera en el desarrollo del primer sistema de recogida neumática de residuos, ¿cómo ha evolucionado su tecnología? ¿qué ventajas supone para una ciudad adoptar este modelo?
Carlos Bernad: Fuimos precursores de la tecnología neumática aplicada a la recogida de residuos en el mundo. Y de eso hace ya más de medio siglo. Básicamente, hemos conseguido que una necesidad básica de la ciudad, como es el de la recogida de residuos, tenga el mismo tratamiento que el resto de servicios de abastecimiento de los que se beneficia el ciudadano. Hablamos, por ejemplo, del agua, la electricidad, las redes sanitarias, la telefonía o los datos. Mediante una planificación adecuada de los nuevos desarrollos urbanísticos, se puede dar una respuesta eficiente e innovadora al problema de la gestión de los residuos en las ciudades. Y esto es lo que hemos demostrado con nuestro sistema en aquellas ciudades españolas y del mundo donde está implantado. A lo largo de los años, el sistema, ya revolucionario desde su origen, ha evolucionado hacia los estándares de la ciudad inteligente.
ESMARTCITY: ¿Qué aporta la Inteligencia Artificial a la recogida neumática de residuos? ¿Qué desarrollos tecnológicos en esta línea veremos a corto plazo?
Carlos Bernad: Si la recogida y el transporte de residuos se conciben como una infraestructura más, mediante canalizaciones subterráneas, como es el caso de la recogida neumática, la posibilidad de añadir inteligencia artificial es un paso relativamente fácil. Bastaría con sensorizar los actuales buzones de vertido y reprogramar los sistemas de control, para que la recogida de residuos lograra dar un salto de gigante. Los ayuntamientos podrían identificar al usuario, medir el volumen o pesaje del residuo introducido, controlar la calidad del mismo, y con ello podrían cobrar o facturar en un futuro por el uso real de este servicio básico.
Pero, fundamentalmente, lo que aporta la Inteligencia Artificial al sistema neumático es la autogestión del mismo; es decir, un sistema de control inteligente en sí mismo, que realiza los vaciados de las redes y los buzones en función de la necesidad en tiempo real. Nos permite disponer de una infraestructura distribuida en la ciudad que actúa en el momento en el que el ciudadano necesita hacer uso de ella. Esta es la gran diferencia con la recogida tradicional con camiones. Estos se siguen enviando diariamente a realizar una ruta predeterminada, independientemente del nivel de llenado de cada contenedor.
ESMARTCITY: ¿En qué medida están las ciudades abiertas a la integración y uso de sistemas novedosos en la gestión inteligente de residuos? ¿Qué percepción tiene el usuario cuando estos sistemas se implantan en su ciudad?
Carlos Bernad: Por lo general, en muchas ciudades no se ha pensado aún que hay otro modo de hacer las cosas, más eficiente y sostenible para los ciudadanos en el campo de la recogida de residuos. Y lo cierto es que, cuando un municipio da el paso de implantar la recogida neumática, termina repitiendo. Lo hemos visto en España y en el resto del mundo. Hemos llevado la neumática a un barrio, y tras comprobar su eficacia, los propios ayuntamientos la han ido extendiendo a otros enclaves urbanísticos. Nuestros estudios y las encuestas que realizamos entre los usuarios, nos muestran que los ciudadanos que utilizan la neumática la valoran muy positivamente, otorgándole notas comprendidas entre el 9 y el 10, y que incluso aquellos que ya la han probado, en caso de trasladarse a otro barrio o ciudad, estarían dispuestos a solicitar su implantación a las autoridades municipales. El usuario de sistemas neumáticos, no desea volver a la recogida tradicional.
ESMARTCITY: ¿Qué uso puede hacer la Administración Municipal de los datos que recoge a través del sistema de recogida de residuos que propone Envac? ¿Qué puede suponer en cuanto a políticas de residuos y medioambientales de una ciudad?
Carlos Bernad: Hablamos de que el ciudadano termine pagando por el uso real y efectivo del servicio que utiliza y no en base a unas previsiones que, muchas veces, se fundamentan en cantidades medias estimativas de producción de basura, o bien vinculando el servicio a los metros cuadrados de la vivienda. Adicionalmente, la inteligencia artificial en los sistemas neumáticos permitirá que se pueda planificar la recogida de basuras de forma personalizada. Será el propio sistema de control el que decida en cada momento, y en base la experiencia previa acumulada, cuál es el mejor modelo prestación del servicio que debe aplicar. La información que el sistema de control puede proporcionar contempla frecuencias y volúmenes de vertido de residuos, tipos de fracciones, horarios, etc. En definitiva, todo en función del uso que cada ciudadano haga del sistema. Hay que tener en cuenta que no es lo mismo la generación de basura de un ciudadano individual, que la de un restaurante, un hotel o un colegio, entes todos ellos que conviven en una ciudad.
ESMARTCITY: ¿Cómo ven desde Envac la evolución en el desarrollo ambiental de las ciudades inteligentes?
Carlos Bernad: Los estudios hablan de que hacia el 2050 el volumen de habitantes que se concentrará en las urbes rozará el 70% de la población mundial, desde algo más del 50% que representa en la actualidad, y esto supone un reto extraordinario de gestión para los municipios, que deberán seguir velando para mejorar el bienestar de sus ciudadanos. Sin duda, hará falta mejorar la sensibilidad de las personas hacia la conservación del espacio y los recursos comunes, pero el verdadero aliado para reducir las emisiones y hacer un uso eficiente de los servicios públicos serán las tecnologías. No me cabe la menor duda.