Según los datos de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), correspondientes al pasado mes de noviembre, en España ya hay 4,33 millones de líneas M2M, un 21,4% más que hace un año. El mercado de las conexiones entre máquinas está experimentando una auténtica revolución en los últimos años, con un crecimiento imparable en todo el mundo.
Según una reciente encuesta de la consultora IDC, un 38% de las organizaciones españolas entrevistadas tiene planes para implementar servicios M2M durante este año, en parte gracias a que esta tecnología les permite mejorar su productividad y rendimiento, así como les supone un ahorro de costes. En este sentido, el mencionado informe VNI de Cisco estima que, en 2020, habrá 210 millones de conexiones M2M en España, el 62% del total de los dispositivos conectados; lo que da una idea del crecimiento esperado, si tenemos en cuenta que en 2015 hubo 82 millones de conexiones, un 44% del total de dispositivos conectados, según este estudio.
“Las conexiones M2M están dejando a un lado el entorno industrial en el que nacieron para extenderse a otros ámbitos. Por ejemplo, ayudan a transmitir el consumo de luz, gas y agua de los contadores a las compañías suministradoras; conectan las alarmas con las firmas de seguridad; o permiten que cualquier centro sanitario controle las constantes vitales de sus pacientes desde su casa”, afirma Frédéric Salles, CEO de una empresa de gestión y comunicación de dispositivos conectados, Matooma. Por tanto, continúa, “el crecimiento de las conexiones M2M viene relacionado con el avance de la implantación del denominado Internet de las Cosas (IoT), que supondrá la conexión a través de líneas móviles de una gran variedad de dispositivos”.