La Oficina Española de Cambio Climático ha seleccionado como Proyecto Clima el plan de sustitución de coches convencionales por eléctricos en el parque móvil de la Junta de Castilla y León presentado por el Ente Regional de la Energía (EREN) en la última convocatoria del Fondo de Carbono para una Economía Sostenible (FES-CO2).

La elección como Proyecto Clima va a suponer, además del reconocimiento por contribuir a la transición hacia una economía baja en carbono, el abono de una cantidad económica durante cuatro años por la responsabilidad demostrada con la sostenibilidad del medio ambiente, en este caso, al haber asumido la Administración autonómica la primera fase del plan, con la renovación de 21 coches por otros eléctricos. Esta iniciativa le permitirá recibir una compensación equivalente a las emisiones que se dejarán de emitir a la atmósfera.
La inversión en esta primera fase del plan es de 700.000 euros entre gastos de compra y mantenimiento de los coches. Considerando un rodaje medio anual por coche de 12.000 kilómetros, el ahorro máximo estimado en emisiones se cifra en 180 toneladas de dióxido de carbono (CO2) hasta el 31 de diciembre de 2020. El precio por tonelada de CO2 reducida está tasado por el MAPAMA en 9,7 euros para 2016 por lo que, si el precio no varía y se cumplen los parámetros indicados para el objetivo de esta primera fase, Castilla y León puede llegar a percibir 1.746 euros con cargo a este programa estatal.