Un ‘taller conectado’, que incluye aplicaciones de realidad aumentada y envía información sobre el estado del vehículo a su dueño para consultarla a través de su tablet o teléfono inteligente, es una nueva propuesta de aplicación de la inteligencia a la movilidad y a tareas cotidianas.
La solución telemática de la compañía Bosch se basa en una unidad de comunicación instalada en el vehículo que envía datos operativos encriptados sobre el estado del coche a una plataforma para su análisis. Entre otros datos, se puede analizar la información sobre la ubicación, el consumo de combustible, el kilometraje del vehículo o incluso el estilo de conducción.
Realidad aumentada para mejorar el servicio del ‘taller conectado’
Con esta información, por ejemplo, un profesional encargado de gestionar flotas de vehículos, tiene una herramienta que le permite aumentar la conciencia de sus empleados para una conducción segura y económica. Por otra parte, a través de equipos de diagnosis se realizan pruebas como la comprobación de la presión de los neumáticos, la profundidad de la banda de rodadura y el estado de la batería. Los resultados se pueden ver inmediatamente en todos los sistemas del taller y se pueden analizar directamente con el cliente o enviárselos a su smartphone.
Además, a través de un dispositivo tecnológico que utiliza realidad aumentada, se puede obtener información del vehículo que puede incluir desde textos explicativos e instrucciones, manuales o diagramas de circuitos, hasta objetos tridimensionales o fotos y vídeos.