El programa europeo Local4Global ha finalizado tras tres años de investigación para hallar soluciones teconológicas con las que mejorar el flujo del tráfico en las ciudades y la eficiencia de instalaciones. Las pruebas piloto realizadas en una carretera con tráfico especialmente denso en Múnich y en un edificio de oficinas en la ciudad de Aechen, han mostrado las aplicaciones prácticas de Local4Global.
La solución tecnológica desplegada en Múnich ha permitido mejorar las condiciones de tráfico de la ciudad en más de un 40% en los momentos de mayor circulación de vehículos. La prueba pilotó consistió en la instalación de dispositivos inteligentes en los semáforos, capaces de decidir por sí mismos el cambio en los tiempos de ciclo verde dependiendo del flujo de tráfico y la demanda, reduciendo sustancialmente la congestión del tráfico y permitiendo que los conductores lleguen a su destino mucho más rápido.
Esta solución para lograr semáforos inteligentes y dispositivos de eficiencia tiene como características fundamentales, el despliegue de un sistema de sensor barato y, sobre todo, que no requiere de ningún ajuste o calibración por parte de los técnicos. Esto permite que los dispositivos puedan aportar información en tiempo real y calcular las decisiones adecuadas en cada momento, así como ser capaces de adaptarse a los continuos cambios del entorno.
Tecnología vasca en el desarrollo de Local4Global
Este es también el caso de la segunda prueba piloto, en la que los dispositivos implantados en un edificio de la ciudad alemana de Aachen decidían de forma autónoma los puntos de ajuste de sus sistemas de climatización mejorando en más de un 30% su eficiencia energética.
En el desarrollo de esta tecnología ha participado IK4-Tekniker, centro de investigación del País Vasco integrante del consorcio europeo del proyecto junto a universidades e institutos tecnológicos de Grecia, Suiza y Alemania. La labor del centro vaso ha sido el desarrollo de un gateway’ o puerta de enlace que interconecta y acopla de manera muy sencilla los diferentes dispositivos ya existentes, como un semáforo, un teléfono móvil o un GPS y los servicios alojados en la nube.