El pasado viernes tuvo lugar la inauguración del Laboratorio de Investigación en Ciberseguridad de Infraestructuras Críticas (CIClab) de la Universidad de León (ULe). El objetivo de la puesta en marcha de este laboratorio es la investigación en el ámbito de la ciberseguridad en infraestructuras críticas en cuatro áreas: los sistemas de control y supervisión industrial, los sistemas de gestión de grandes edificios, el control y supervisión de energía eléctrica y las redes de sensores de las smart cities.
Las infraestructuras críticas son aquellas que proporcionan servicios esenciales a la sociedad, como hospitales, suministros de energía y transporte, cuyo funcionamiento es indispensable y no permite soluciones alternativas, por lo que su destrucción tendría un grave impacto sobre los servicios esenciales.
Las infraestructuras críticas mantienen en funcionamiento los sectores estratégicos del país, que la normativa española agrupa en administración, agua, alimentación, energía, espacio, industria química, espacio, industria nuclear, instalaciones de investigación, salud, sistema financiero, tecnologías de la información y las comunicaciones y transporte.
Estas infraestructuras fueron a menudo diseñadas para operar como sistemas aislados y no conectados en red
, explica Manuel Domínguez, director del Grupo de Investigación SUPPRESS, al tiempo que incide en que, con los avances de las tecnologías de la información, se ha expuesto a estos sistemas a una serie de amenazas para las que no están preparados y que los hacen vulnerables a ataques maliciosos. Por eso es una materia de máxima prioridad para evitar incidentes que ocasionen graves pérdidas económicas, comprometan la seguridad de las personas o causen desastres medioambientales
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Simulaciones de situaciones reales
El Grupo de investigación SUPPRESS de la Universidad de León (ULe) solicitó en el año 2014 una infraestructura de investigación en el Subprograma Estatal de Infraestructuras Científicas y Técnicas y de Equipamiento, en el marco Plan Estatal de Investigación Científica y Técnica y de Innovación 2013-2016.
Dicha infraestructura fue aprobada por el Ministerio de Economía y Competitividad en noviembre de 2014 y dotada con un presupuesto de 270.000 €, dos tercios de su coste total final. Durante el año 2015 se ha procedido a la adquisición, implantación y puesta en marcha del equipamiento tecnológico.
El Laboratorio de Investigación en Ciberseguridad de Infraestructuras Críticas, ubicado en el edificio Módulo de Investigación Cibernética (MIC), en el Campus de Vegazana, cuenta con una plantilla de 18 personas, 14 del propio Grupo de Investigación SUPPRESS y 4 expertos en ciberseguridad que aporta el INCIBE. Además, dentro de su dotación dispone de tecnologías industriales complejas, y sistemas de control y equipos reales aplicables al ámbito de las infraestructuras críticas.
Su diseño está orientado a permitir flexibilidad en cuanto a la creación de diferentes configuraciones que simulen situaciones reales en los sistemas de control de estas infraestructuras, y para ello, contamos con diversas tecnologías alternativas para cada nivel de automatización de los sistemas de control industrial, de la energía y de edificios
, explica Manuel Domínguez, director del Grupo de Investigación.
Las aplicaciones esperadas del citado laboratorio son la investigación, la evaluación de tecnologías y la formación práctica. Además, también tiene como objetivo dar servicio a otros organismos y empresas, a través de los acuerdos que ha realizado con el INCIBE y con la Red Nacional de Laboratorios Industriales, a la que pertenece desde su creación.