El Ayuntamiento de Antequera se dispone a comenzar a sustituir 4.000 antiguos faroles de pared del alumbrado público por otros fabricados con tecnologías LED y que podrán ser monitorizados con un sistema de control remoto que informará del estado de cada farol, informará de las posibles averías y permitirá regular la intensidad de la luz.
El sistema de monitorización de los faroles inteligentes se basa en la telegestión punto a punto mediante radiofrecuencia, incorporando así el concepto de Internet of Things. A través de la tecnología de telegestión ‘RFLiht2’, el Ayuntamiento puede controlar individualmente cada farol mediante una plataforma web que ofrece la posibilidad de regular los consumos en función de las horas o del desarrollo de acontecimientos en el municipio.
El Ayuntamiento estima que se ahorrará un consumo de más de dos millones de kilowatios hora por año que, traducido a euros, suponen un ahorro de más de 262.000 euros. Los faroles inteligentes también permiten la reducción de emisiones de CO2 a la atmósfera que, en este caso, se ha cuantificado en 840.840 kilogramos menos al año.
Diseño ‘antequerano’
Los nuevos faroles se han diseñado desde cero para cumplir la ordenanza municipal que regula ahora todos los aspectos mecánicos, constructivos y eléctricos del mismo, habiéndose basado en su diseño y morfología en el anterior farol ‘antequerano’ pero con la ventaja de tener mucha mayor eficiencia y rendimiento lumínico, puesto que se consume un tercio de los 150 watios que consumen los faroles antiguos y sin embargo ilumina mucho más.
Por otra parte, la calidad de la luz es mayor, puesto que posee un índice de reproducción cromática que permite distinguir una mayor gama de colores. Además, ofrece un rendimiento lumínico superior a 90 lúmenes/watio, con temperaturas de color de 3000K y 4000K, en función de las zonas del municipio.
Este proyecto se une al conjunto de la renovación de los sistemas de iluminación del alumbrado público antequerano que se lleva acometiendo en los últimos meses y que ya ha conllevado la sustitución de casi 2.000 luminarias de otros tipos con los objetivos comunes de renovación, de cumplimiento de la normativa de contaminación lumínica y de mejora de eficiencia energética.