España podría reducir su consumo energético un 25% y estimular el crecimiento económico si adoptara las tecnologías de eficiencia energética existentes, según el informe sobre Productividad Energética y Prosperidad Económica 2015. Dicho informe, encargado por Royal Philips, es el primer índice global que crea un ranking por países en función del uso productivo que hacen de la energía y sitúa a España en el top 25, muy por encima de la media europea.
El informe avisa, sin embargo, que España corre el riesgo de ver fuera de control su uso energético debido a su reciente período de infrainversión en tecnología de eficiencia energética. El informe destaca como prioridad clave el despilfarro energético en edificios, recomendando la adopción de tecnologías como los sistemas de iluminación LED que pueden llegar a ahorrar un 70% de energía.
Estas medidas recortarían el uso energético un 27% para el año 2030, lo que estimularía el crecimiento del PIB, crearía empleo, y recortaría las facturas domésticas, de acuerdo al estudio elaborado por el Consejo de Lisboa, Ecofys y Quintell Intelligence.
El índice valora las economías según su productividad energética, es decir, la cantidad de PIB que producen por cada unidad de energía que consumen. Este concepto difiere de la eficiencia energética, la cual se refiere a utilizar menos energía para obtener el mismo servicio. El informe alerta de que alrededor del 98% de la energía que se produce en todo el mundo se ‘gasta’ debido a la ineficiencia. Un ejemplo sencillo de productividad energética es la cocción de un huevo, donde sólo el 2% de la energía consumida se dedica realmente a cocer el huevo.
España podría doblar su productividad energética actual
España produce 236.000 millones de euros de PIB por exajulio de energía utilizado, lo que la sitúa en la 23ª posición a nivel global. Este dato es muy superior a la media europea de 206.000 millones de euros de PIB por exajulio, y sitúa a España en el sexto lugar entre los 28 Estados Miembros de la Unión. Los mejor situados en el ranking del mundo son Hong Kong (456.000 millones de euros) y Cuba (365.000 millones). De acuerdo al escenario de crecimiento de la productividad energética presentado en el informe, España podría incrementar su PIB a 471.000 millones de euros por exajulio para el año 2030.
España ha sufrido un prolongado período de infrainversión crónica en tecnologías clave, incluyendo las tecnologías de ahorro energético. La buena noticia es que la economía española podría prosperar a la vez que reduce sus necesidades energéticas
, dice el autor del informe Paul Hofheinz, cofundador del Consejo de Lisboa, un Think Tank de Bruselas. Las inversiones en eficiencia energética crean empleo, y como España importa la mayor parte de su energía, ello reduciría la dependencia del país en suministros externos y las facturas energéticas
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El informe afirma que el dinero que se ahorre de reducir las importaciones extranjeras de combustible podría ser gastado en el propio país en otros bienes y servicios, incluyendo las inversiones. España necesitará recortar su consumo energético en los hogares y en los edificios no residenciales un 3% anualmente. Debido al clima local, la mayor parte de este ahorro deberá provenir de áreas ajenas a la climatización, como son la iluminación y los electrodomésticos.
Iluminación conectada LED
La tecnología existente, como la iluminación LED es un contribuidor clave para abordar el aumento de la demanda energética del futuro. Por ejemplo, la iluminación LED es capaz de alcanzar una mejora del 500% en la productividad energética en un hogar medio.
La productividad energética de un hogar puede mejorar radicalmente sólo cambiándose a la iluminación LED
dijo Harry Verhaar, Head of Global Public and Government Affairs en Philips Lighting. Cuando la iluminación LED se conecta a sensores, apps y controles, puede alcanzar niveles de ahorro de hasta el 70% en comparación con la iluminación convencional. Esto representa la mayor revolución para el alumbrado desde el origen de la iluminación eléctrica, lo que redefine su finalidad y lleva el alumbrado a un mundo completamente digital
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Es el caso de la ciudad de Madrid que, gracias a la renovación de su alumbrado público, obtendrá unos ahorros energéticos del 44% respecto a la instalación anterior. Los 225.000 puntos de luz que se están interviniendo le convierten en el proyecto de renovación de alumbrado público más grande del mundo.
Productividad energética y empleo
Europa podría doblar su índice anual de productividad energética de un 1,5% a un 3% para el año 2030 adoptando estas tecnologías en los hogares, edificios no residenciales, agricultura, transporte e industria. En la UE esto crearía 1,2 millones de empleos en cinco años y reduciría un tercio la factura energética de una familia media para 2030. Esto también supondría un aumento del 1.1% del PIB y recortaría el consumo energético un 35%, de acuerdo al informe.
Finalmente, el informe hace un llamamiento urgente a los políticos para imponer objetivos más ambiciosos y regulaciones más duras para estimular una adopción más rápida de las tecnologías de eficiencia energética y mejorar la productividad energética.