La Comisión Europea ha desarrollado un nuevo indicador de economía y sociedad digital. Los datos muestran que la situación varía mucho de unos a otros países y las fronteras siguen suponiendo un obstáculo al Mercado Único Digital que es una de las principales prioridades de la Comisión.
El nuevo indicador, Digital Economy and Society Index (DESI), publicado la semana pasada, es un indicador compuesto que resume más de 30 indicadores relevantes del desarrollo de la Europa Digital y sigue la evolución de los estados miembros según 5 dimensiones principales:
- Conectividad. Como de rápida, extendida y económica resulta la banda ancha.
- Capital humano. Las habilidades en internet.
- Uso de internet. Desde por ejemplo servicios de noticias a compras.
- Integración de la tecnología digital. Como por ejemplo las tecnologías digitales claves (factura electrónica, servicios cloud, comercio electrónico, etc.).
- Los servicios públicos digitales. Incluyendo la administración electrónica (e-government) y los servicios de salud (e-health).
Considerando los servicios públicos digitales se pone de manifiesto que son una realidad del día a día en algunos países, sin embargo, hay otros en los que prácticamente no existen. El 33% de los usuarios europeos de internet han usado formularios en línea para enviar información a las autoridades públicas, variando entre el 69% de Dinamarca y el 6% de Rumanía. España alcanza un 37%.
Para el seguimiento de progreso del indicador se ha preparado una ficha por cada Estado Miembro. En la ficha correspondiente a España se observa cómo España destaca en la dimensión de los servicios públicos digitales, con una puntuación de 0,65, se sitúa en el puesto 6 entre los países de la UE. Además, los resultados de España han mejorado más rápidamente que la media de la UE.
En cómputo general, España ocupa el puesto 12 entre los 28 Estados miembros de la UE. A lo largo del pasado año, España ha mejorado sus resultados en todos los ámbitos examinados por el DESI. En particular, España está mejorando su comportamiento en materia de conectividad, a favor del despliegue de las redes rápidas de banda ancha (el 65 % de los hogares dispone de acceso a banda ancha de alta velocidad), aunque con diferencias entre regiones.
En general, España presenta debilidades del lado de la demanda, con niveles bajos de competencias digitales (solo un 58% de españoles posee las competencias digitales básicas) y de uso de internet, pero fortalezas del lado de la oferta, tanto en relación con las empresas (aumento significativo del número de pymes que venden en línea y utilizan la facturación electrónica) como con los servicios públicos.
El índice digital es particularmente relevante dado que la comisión Europea está preparando su estretegia para el mercado único digital que será publicada en mayo. Esta estrategia persigue crear las condiciones adecuadas para que los ciudadanos y empresas europeas puedan aprovechar mejor las oportunidades de las tecnologías digitales.