El Ministerio de Fomento, el Ayuntamiento y la Comunidad de Madrid y la empresa Distrito Castellana Norte Madrid han suscrito un acuerdo para la puesta en marcha del proyecto Distrito Castellana Norte Madrid, que supondrá la transformación del norte de Madrid con la prolongación en 3,7 kilómetros del Paseo de la Castellana y la modernización de una zona de más de 3 millones de metros cuadrados.
En el acto de presentación intervinieron Ana Botella, Alcaldesa de Madrid; el Presidente de BBVA, Francisco González; la Ministra de Fomento, Ana Pastor, y el Presidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio González. Asimismo, tras a intervención de los representantes institucionales, explicaron más detenidamente el proyecto Antonio Béjar, Presidente del Distrito Castellana Norte Madrid, y Flavio Tejada, Director de la Oficina Técnica de ARUP.
La actuación, según se ha expuesto, se llevará a cabo bajo estrictos parámetros de calidad y respeto al medio ambiente, con edificios dotados de energía solar, eólica y geotérmica, entre otras medidas, y supondrá una remodelación del sistema de equipamientos, servicios, transportes y comunicaciones de la zona.
Está previsto que el proyecto, fruto de la colaboración público-privada y del debate con más de 50 instituciones implicadas (incluidas asociaciones de vecinos), se ponga en marcha a comienzos de este año con un horizonte para su desarrollo de 20 años.
La nueva zona nace con la intención de ser no sólo un centro de negocios, sino de albergar zonas residenciales, de ocio, comercio y todos los servicios para el desarrollo de la vida de los ciudadanos, así, se diferencian cuatro áreas de actividad:
- Parque central: cuyo uso principal será residencial, con unas 24 hectáreas de zonas verdes y alrededor de 6.300 viviendas.
- Área de Negocios: donde se construirá un centro empresarial que pretende convertirse en referencia nacional e internacional.
- Prolongación de la Castellana: cuyo uso principal será también residencial y de ocio, con capacidad para unas 10.000 viviendas y en el que la movilidad sostenible estará muy presente en los 12,8 kilómetros de carril bici proyectados y la potenciación del transporte intermodal.
- Área tecnológica: que prevé convertirse en centro de conocimiento internacional y de desarrollo.
Zonas verdes e infraestructuras públicas
El 80% del suelo se destinará a infraestructuras públicas para uso y disfrute de los madrileños, con más de 566.000 metros cuadrados de espacios verdes (superficie equivalente a 56 estadios de fútbol), equipamientos sociales, servicios urbanos y una vía ciclista con una longitud de 12,8 kilómetros. Además, el 25% del suelo permanecerá destinado a usos exclusivamente ferroviarios.
En la redacción, diseño y planificación del proyecto “Distrito Castellana Norte Madrid” ha participado un equipo multidisciplinar, con expertos en urbanismo como el estudio de Richard Rogers y la ingeniería ARUP.
El proyecto se va a ejecutar por fases, atendiendo siempre a las necesidades y evolución del mercado. Cada fase del proyecto será independiente de la siguiente. En este sentido, se han encargado informes a consultoras como CB Richard Ellis, Jones Lang Lasalle o Savills, para analizar no solamente la realidad del mercado sino sus previsiones.
Servicios de proximidad
El proyecto Distrito Castellana Norte Madrid desempeñará un papel clave en la expansión y proyección exterior de las empresas y actividades madrileñas y de la imagen de la capital. El proyecto favorecerá la revitalización del comercio y de los servicios de proximidad, el desarrollo de actividades económicas de alto desarrollo tecnológico con la consiguiente atracción de talento y el impulso a las relaciones internacionales dada la potencialidad del mismo para implantación de compañías de todo el mundo.
Para la elaboración del plan se han estudiado y recogido lo mejor de algunas experiencias similares en ciudades como Nueva York, Londres, Ámsterdam y Hamburgo. Con la participación del Ministerio de Fomento, la Comunidad de Madrid y Ayuntamiento de Madrid y resto de promotores, se ha planificado un modelo para la zona norte de Madrid en el que las personas son las protagonistas.
Esta actuación mantiene un firme compromiso con el desarrollo sostenible, con estándares muy por encima de lo que marca la ley. Se ha dado una gran importancia a la aplicación de criterios de sostenibilidad, con una apuesta decidida por la movilidad en el transporte, tanto público como privado.
Movilidad sostenible
El proyecto se articula en torno a un innovador sistema de transporte de alta capacidad y un uso reducido del vehículo privado, aunque siempre ajustado a las necesidades de los usuarios. La zona contará con tres paradas de metro, dos de cercanías y los mencionados 12,8 kilómetros de carril bici.
El peatón es protagonista de la ciudad y así todos los residentes tienen un sistema de transporte público en una cobertura de menos de 350 metros. Adicionalmente, habrá una distancia máxima de 1 kilómetro hasta alguno de los intercambiadores existentes y proyectados de Plaza Castilla, Chamartín, CBD Norte, Fuencarral y Las Tablas.
Según han destacado los ponentes, la actuación supondrá además importantes beneficios, no sólo para los vecinos de esta zona sino también para la economía local, regional y nacional, ya que durante su desarrollo se generarán más de 121.000 puestos de trabajo y unos beneficios económicos para las administraciones públicas superiores a los 3.363 millones, que se revertirán en mejoras para los ciudadanos.
El plan se ha diseñado cuidando las necesidades y expectativas de los vecinos de los barrios limítrofes y priorizando la vertebración de los distritos con la nueva ordenación, a través de una malla de interconexiones que entrelace los diferentes núcleos de población.
Otro de los ejes en los que se trabaja es la mejora de las infraestructuras ferroviarias, incluida la Estación de Chamartín y el cubrimiento parcial de las vías.