La Red Española de Ciudades Inteligentes (RECI) ha estado presente en el I Congreso de Edificios Inteligentes, organizado por el Grupo Tecma Red durante los días 23 y 24 de octubre, a través de la figura de la Alcaldesa de Logroño y Vicepresidenta de RECI, Cuca Gamarra, encargada de impartir una conferencia magistral sobre “El edificio inteligente en el contexto de la Smart City”.
Gamarra ha presentado la estación de tren de Logroño como emblema de “edificio inteligente", previamente, la alcaldesa ha realizado un recorrido por el contexto europeo, las iniciativas desarrolladas por RECI y las medidas adoptadas en el Ayuntamiento que rige.
Cuca Gamarra ha afirmado que Logroño trabaja para ser una “ciudad modelo en la implantación de medidas para que sea una auténtica ciudad inteligente”. En consecuencia, según ha explicado, “la gestión municipal prioriza la innovación tecnológica como punto de apoyo, no sólo por el despliegue de infraestructuras de comunicación, sino también por ser cercana a los ciudadanos, resolviendo los problemas del día a día”.
La alcaldesa ha fundamentado en el Programa de Ahorro y Eficiencia Energética y las diez medidas de choque las actuaciones realizadas en la gestión de edificios y alumbrados públicos. Como principales actuaciones ha destacado el sistema de gestión remota de la luz de los centros deportivos de Logroño, la regulación de la climatización de los edificios públicos y centros dependientes, la contratación centralizada de gas, electricidad y carburante, el ajuste de potencias y consumos, medidas de telecontrol y eficiencia de consumos en colegios o el uso de energías renovables en edificios municipales, como solar, hidráulica, geotérmica o biomasa.
La estación de tren, ejemplo de edificio inteligente
Cuca Gamarra ha hecho un apartado para poner como ejemplo de “edificio inteligente” a la nueva estación de tren de Logroño que, ajustando los consumos a la actividad ferroviaria, consigue un ahorro energético del 97%, con un consumo que no alcanza los 10 kwh por día.
Así, se ha referido a que su diseño arquitectónico favorece la entrada de luz natural a los andenes, a través de catorce lucernarios, que también permiten regular de forma natural la temperatura en el interior del túnel y, además, cuenta con sistemas de gestión integral para reducir el consumo energético hasta tan sólo 9,9 Kw/h en régimen de explotación ferroviaria.
Esta nueva estación dispone del denominado Sistema Dalí, que permite regular cada una de las 168 luminarias de forma individual, así como su intensidad con valores de luminosidad entre el 100% y el 10%. Las luminarias se regulan en función del nivel de luz que entra por el lucernario. Además, el sistema Dalí tiene grabada la longitud de los trenes para encender sólo el tramo de andén que ocupa cada tren.
Por último, la configuración de la nueva estación de ferrocarril permite el control de acceso de los viajeros a los andenes. A través del sistema de información al viajero se conoce en todo momento la posición del tren en la línea, posibles retrasos y hora exacta de llegada: de este modo diez minutos antes de la llegada se anuncia en los teleindicadores y por megafonía, se abren las puertas de acceso a los andenes y se encienden las luminarias; cinco minutos después de su salida las luces se apagan.