El Casco Histórico de Sevilla será escenario de pruebas del proyecto europeo Dareed, con el que se creará una plataforma tecnológica capaz de gestionar la energía en una Smart City. Esta iniciativa comunitaria, que supone una inversión de más de cuatro millones de euros, ha logrado aunar a 12 entidades e instituciones de Alemania, Gran Bretaña, Italia y España lideradas por la empresa Isotrol y utilizará para su prueba piloto el Casco Antiguo de Sevilla.
En este proyecto están involucradas 12 empresas e instituciones de Alemania, Gran Bretaña, Italia y España. La Comisión Europea ha aprobado el proyecto dentro de la línea dedicada a la eficiencia energética para Smart City del VII Programa Marco comunitario. Junto a Sevilla servirán de escenario de prácticas la ciudad italiana de Lizzanello y el distrito de Cambridshire.
En este sentido, los trabajos técnicos se coordinarán desde la Corporación de Empresas Municipales de Sevilla, y contará con la Agencia Local de la Energía como dinamizador en las tareas de comunicación de los resultados obtenidos. Las empresas Municipales de la ciudad, así como otros organismos municipales como el IMD o la Gerencia Municipal de Urbanismo serán parte activa de este proyecto, donde se realizarán acciones e inversiones en materia de eficiencia energética.
Ciudadano como sujeto activo
Según plantea el proyecto, el ciudadano "se convertirá en un sujeto activo, con más información sobre su pauta de consumo y por tanto, con mayor capacidad para decidir, poner en marcha medidas y reducir su factura eléctrica".
El presidente de Isotrol, José Luis Calvo, ha asegurado que "Dareed permitirá desarrollar nuevas tecnologías e integrar las que hoy funcionan aisladamente en el campo de la gestión energética para ofrecer una solución de conjunto que permita abrir nuevas posibilidades, y en la que estén implicados todos los actores, desde el ciudadano a las empresas y administraciones".
Así, Calvo ha explicado que "Dareed contará con un centro de control desde el cual se podrá monitorizar el consumo y la generación de energía en una zona o de una ciudad en su conjunto con información procedente de sensores propios y de datos de contadores inteligentes y otros instrumentos de medición de los consumos". Además, "podrá realizar simulaciones de posibles medidas de ahorro tanto en edificios como en instalaciones de uso público; hacer recomendaciones a los usuarios y comprobar la evolución de los consumos y los ahorros obtenidos si deciden aplicar de forma voluntaria dichas medidas".
Para ello, creará un conjunto de herramientas de monitorización en tiempo real del uso de la energía en Smart City, otras para la simulación así como sistemas para exponer la información obtenida de forma sencilla de modo que se ayude a la toma de decisiones por parte del usuario. También diseñará instrumentos para la gestión de redes inteligentes, donde se incorporarán las energías renovables, tal como la fotovoltaica, y la cogeneración. Además, la plataforma tecnológica incorporará elementos de control e incluso permitirá dar consignas directas sobre elementos como el alumbrado o climatización de edificios públicos de climatización, previo acuerdo con los responsables de los mismos.
Empresas, consumidores y administraciones
Esta plataforma convertirá a empresas, consumidor y administraciones en sujetos activos que deberán tomar decisiones para hacer un uso sostenible de la energía, para lo que se les hará llegar información sobre sus consumos así como recomendaciones. También se proporcionará información a las comercializadoras de energía y las compañías de servicios energéticos, de modo que éstas puedan generar nuevas ofertas a sus clientes.
Dareed abrirá además la puerta a nuevos modelos de negocio. Así, se probará la creación de un "market place", donde el consumidor se inscribirá de forma voluntaria, elegirá aquellas mejoras que esté dispuesto a realizar y podrá obtener ofertas de distintas empresas especializadas en eficiencia energética.
En este proyecto europeo están involucrados junto a Isotrol otros once socios: la empresa energética Enel, las tecnológicas alemanas Cleopa GmbH y Open Experience, así como el consistorio hispalenes a través de su Corporación de Empresas Municipales, los ayuntamientos de Cambridgeshire y Lizzanello, la universidad italiana de Bolonia y la de Brunel de Londres, además del italiano Centro de Planificación, Diseño y Tecnología de Materiales; el Instituto Andaluz de Tecnología, y el Instituto de Tecnología de Karlsruher.