El crecimiento exponencial del consumo eléctrico hace prever, según los expertos, que para el año 2030, la dependencia de la electricidad será el doble de la actual debido al aumento de la población y al crecimiento económico. Ante tales previsiones, las administraciones se enfrentan al reto de redefinir los términos del actual modelo energético y cambiarlo por otro más sostenible.
Las redes actuales están diseñadas para una producción centralizada y un flujo unidireccional de la energía, de la planta al consumidor. La expansión de fuentes de energías renovables viene acompañada por un correspondiente crecimiento en la distribución de la energía generada. En muchas regiones aún se produce menos energía de la que consume, sin embargo, si en el futuro se produce más energía de la consumida, el sobrante de electricidad podrá dar la vuelta al modelo tradicional y crear un flujo de energía reversible.
La prueba inicial, que comenzó en 2011 y tendrá una duración de dos años, se está desarrollando en la zona circundante a Wildpoldsried (Baviera, Alemania), donde, actualmente, se genera el triple de electricidad de la que se consume en la región, lo que la convierte en el lugar idóneo para llevar a cabo esta práctica.
Dentro de este proyecto, Siemens y la compañía de servicios públicos Allgäuer Úberlandwerk (UAW), junto con el RWTH de la Universidad de Aachen y el Kempten College, están probando una Smart Grid formada por sistemas fotovoltaicos, turbinas eólicas y plantas de biogás, controlada por el software de automatización, “So Easy” (acrónimo de su nombre en inglés: Self-Organizing Energy Automation System) de Siemens.
El programa también incluye la expansión de una infraestructura de recarga de vehículos que podrá usar la electricidad generada de manera eco-sostenible. Además de numerosos sensores de medición, componenetes de la red y una batería de almacenamiento de gran capacidad para guardar temporalmente la electricidad.
Los principales beneficios de este proyecto son:
- Los consumidores podrán ahorrar en sus facturas cambiando los hábitos de consumo.
- Los productores podrán comercializar su energía más efectivamente en el futuro.
- Mejorar la gestión de la energía equilibrará la producción y el consumo. Con el software desarrollado por Siemens y las estaciones de medición, será posible, sigficativamente, reducir la necesidad de expansión de la red, lo que conllevará una potencial rebaja en el coste de producción y, por tanto, una rebaja en el precio de la electricidad.