IBM ha presentado en Málaga las conclusiones del estudio que expertos de la Compañía han llevado a cabo en las últimas semanas y cuya finalidad es potenciar el desarrollo económico y mejorar la competitividad de la ciudad.
Dicho estudio —que se enmarca en la iniciativa de la Fundación IBM denominada Smarter Cities Challenge— destaca que existe un potente ecosistema socio-económico en Málaga, formado por empresas, el mundo académico, instituciones y emprendedores. Sin embargo, a juicio de los expertos de IBM, este entorno se encuentra muy fragmentado y no tiene la orientación adecuada al mercado. Para mejorar esa situación, los expertos indican que sería necesario establecer un modelo de gobierno y desarrollo económico integrado, desde el que se puedan definir métricas comunes para el seguimiento de las distintas áreas.
El informe apunta, asimismo, a la necesidad de fomentar la colaboración público-privada y el uso de la tecnología como elemento integrador de la información y facilitador del crecimiento económico.
El desarrollo de una única marca de la ciudad ayudaría, igualmente, a dar cohesión a las fortalezas de la ciudad y a vender el proyecto Málaga en todo el mundo. En el desarrollo de esta marca se han de aprovechar los esfuerzos realizados en industrias como el turismo, la energía o las infraestructuras, así como el potencial de su cultura y estilo de vida. El trabajo realizado sobre “Málaga Valley”, entendido por los expertos como concepto consolidado, ha de servir de base sobre la que construir los valores y atributos de la marca única.
Conclusiones y recomendaciones
El equipo de expertos de IBM ha sintetizado sus principales conclusiones en torno a 4 ejes fundamentales y cuya puesta en marcha a lo largo de los próximos 3 años contribuiría a desarrollar una economía sostenible en Málaga y a aumentar la competitividad empresarial.
- Desarrollo económico: Existe ya una base estratégica sólida de desarrollo económico que, no obstante, puede mejorarse y sobre la que -se recomienda- deben centrarse los esfuerzos de inversión y recomendaciones de cara al futuro.
- Colaboración público-privada. Respecto a este punto, se ven amplias posibilidades de mejora, tanto en la orientación de las incubadoras y los emprendedores a las dinámicas del mercado y los nichos de oportunidad, como en mejorar el desarrollo de planes de negocio y financieros, o la comercialización de nuevas ideas.
- Branding (marca): Se ha analizado la marca “Málaga”, concluyendo que hay dispersión en el tratamiento de la marca, no existiendo una marca única y que hay una cultura emprendedora muy limitada al respecto, lo que presenta importantes oportunidades de expansión de la marca de cara al futuro. Su integración en el plan estratégico ayudará a vender mejor la ciudad a nivel global.
- Tecnología: Se identifica la necesidad de adoptar un enfoque colaborativo desde el punto de vista tecnológico, con el fin de que las instituciones públicas puedan tomar mejores decisiones, fruto de la integración de la información existente, promoviendo una mayor apertura hacia el ciudadano y el alineamiento de las decisiones estratégicas y tecnológicas.
En este sentido, desde el punto de vista del desarrollo económico, IBM recomienda la armonización de las distintas políticas existentes en la actualidad. Y ello -sugieren los expertos-, en torno a una única política de desarrollo económico municipal que debería ser la que definiera las áreas prioritarias en las que centrarse y estableciera métricas comunes de seguimiento que permitiesen su evaluación anual respecto a los objetivos fijados inicialmente. Una acción concreta recomendada en este eje sería, por ejemplo, la creación de un único Centro de Excelencia Municipal para el Desarrollo Económico, que serviría de núcleo para compartir el conocimiento y fomentar la colaboración entre sus miembros mediante la utilización de tecnologías colaborativas y de redes sociales.
Desde el punto de vista de la colaboración público-privada, IBM recomienda poner en marcha iniciativas que faciliten no sólo la creación de nuevas empresas a través de la base de incubadoras empresariales, sino reforzar el seguimiento posterior con programas de mentoring y coaching, es decir, de apadrinamiento y seguimiento de los proyectos incipientes por parte de agentes externos que faciliten la viabilidad de los nuevos proyectos empresariales en sus primeros años de vida.
En ese sentido, es también necesario el establecimiento de un ecosistema que permita la transferencia tecnológica entre la universidad y las empresas que desarrollen su actividad en las áreas industriales identificadas como prioritarias. Igualmente, es necesario desarrollar una estrategia educativa “inteligente” que base las decisiones en los datos aportados por todas las partes implicadas —centros educativos, alumnos, empleadores— y que permita definir las áreas de especialización necesarias para el futuro tejido empresarial de la ciudad. IBM recomienda, asimismo, impulsar la creación de un entorno que fomente la inversión empresarial, en base al rigor y la transparencia en la aportación de recursos públicos; el fomento de la apertura de negocios también de capital extranjero en la ciudad; y la creación de cooperativas de medianas empresas que, por ejemplo, podrían mejorar su poder de compra al adoptar estos modelos de colaboración.
Respecto a la notoriedad y atractivo de Málaga como marca, IBM recomienda que los esfuerzos se centren en el desarrollo de un posicionamiento único, lo cual redundaría en el desarrollo del esfuerzo emprendedor y la cohesión del ecosistema empresarial, y serviría de atractivo para la inversión extranjera.
Finalmente, las tecnologías de la información deberían jugar un papel importante en este contexto, dado que pueden fomentar la participación ciudadana, mejorar la gestión de la información de las instituciones e incrementar el atractivo económico de la ciudad.
Es preciso, por tanto, contar con una estrategia tecnológica alineada a la estrategia de desarrollo económico que se defina. En cualquier caso, para poder medir el éxito de una iniciativa tan ambiciosa como esta, es necesario desarrollar un modelo de medición objetivo que permita evaluar el camino y progreso recorridos, bien frente a otras ciudades de referencia o bien frente a los objetivos aspiracionales marcados en el plan inicial. Las tecnologías de la información proporcionan una plataforma adecuada para recoger y analizar los datos necesarios, si bien deben definirse previamente objetivos claros, mensurables, realistas, relevantes y fijados respecto a un marco temporal determinado.
Metodología
La metodología del estudio ha supuesto la realización por parte de los expertos de IBM de 55 entrevistas con representantes del mundo institucional, empresarial y político de la ciudad de Málaga, así como numerosas reuniones de trabajo, visitas a instalaciones y el análisis de diversa documentación. Ha sido a partir de este trabajo de campo del que se han extraído las conclusiones que sirven de base del plan de acción y las recomendaciones que IBM ha propuesto hoy para la ciudad de Málaga.
De este modo se ha agrupado el análisis en torno a tres aspectos fundamentales, como son la (a) “estrategia y planificación”, (b) la “gestión, seguimiento y control”, y (c) la “puesta en marcha” de los distintos aspectos analizados.
Por ejemplo, en el eje de “estrategia y planificación” se han analizado las políticas ya existentes en Málaga de desarrollo económico, promoción y marketing de la ciudad, las políticas y acciones de apoyo a la mediana y pequeña empresa, la transferencia de conocimiento desde la universidad, o la colaboración entre los distintos organismos gubernamentales e instituciones.
Por otra parte, en el eje de “gestión, seguimiento y control” se han analizado factores tales como la competitividad de las ubicaciones empresariales, el modo en que se gestionan actualmente las infraestructuras de tecnologías de la información, el clima empresarial existente, los programas de apoyo a los emprendedores en marcha o los programas actuales de colaboración académico-privados, entre otros.
Finalmente, en el eje de “ejecución y puesta en marcha” se han analizado aspectos relativos a la gestión financiera y presupuestaria, los programas de marketing y comunicación en ejecución, los modelos de financiación a empresas emprendedoras, las facilidades existentes para el networking empresarial, el establecimiento de incubadoras empresariales, etc.
Sobre el Smarter Cities Challenge
El pasado 15 de marzo, la Fundación IBM incluyó a la ciudad de Málaga en su programa Smarter Cities Challenge (#smartercities). Esta iniciativa pretende fomentar y mejorar los sistemas y procesos urbanos de 100 ciudades del mundo. La aportación total de los servicios y las tecnologías que IBM aportará a estas 100 ciudades equivale aproximadamente a 50 millones de dólares y la cantidad estimada que se asigna a cada ciudad es de hasta 400.000 dólares. Este es el segundo de los tres años de duración del Smarter Cities Challenge.
Este programa, que se enmarca dentro de las políticas de Responsabilidad Social Corporativa (RSC) de IBM, proporciona a las ciudades elegidas un acceso directo al talento y la experiencia tecnológica de los profesionales de la Compañía, quienes analizan las oportunidades y los retos que hoy día afronta cada una de las urbes seleccionadas. Así, tras consultar con políticos, empresarios, líderes sociales, universidades y ciudadanos de la respectiva comunidad, los equipos de IBM recomiendan las acciones que se deberían implantar para que la integración de los servicios ciudadanos se desarrolle de forma más eficiente e innovadora.