Indra se ha adjudicado un contrato con la Empresa Municipal de Transporte Público de Wroclaw, la cuarta ciudad más grande de Polonia, para implantar su tecnología inteligente de gestión del transporte público por un importe de 1,7 M€ y un plazo de ejecución de un año.
Indra implantará un Sistema de Ayuda a la Explotación (SAE) que comprende, entre otros, los subsistemas de información al viajero, gestión de flotas y video vigilancia embarcada en 251 vehículos, 136 autobuses y 115 tranvías de la ciudad. El SAE proporcionará una mayor eficiencia en la gestión y mejorará la calidad del servicio ofrecido a los viajeros, el conocimiento de la demanda, la seguridad para empleados y usuarios, el control sobre el vandalismo y las auditorías de accidentes.
El SAE, verdadero “cerebro” del transporte de viajeros, contará con tres pilares básicos: el equipo embarcado de gestión, control y localización basada en GPS; la infraestructura de comunicaciones móviles basada en tecnología GPRS y 3G; y el centro de control, donde se realiza el seguimiento y control del servicio, basándose en sistemas de información geográfica (GIS), que permiten conocer en todo momento dónde se encuentra cada vehículo de la flota y tomar decisiones en tiempo real en caso de incidentes, necesidad de refuerzos, etc. La solución también contará con herramientas para generación de informes y gráficos, que facilitan la supervisión del servicio y la medición de los parámetros de calidad del mismo con el fin de ajustarlo mejor a la demanda real de los ciudadanos.
Gracias a esta tecnología, desde el centro de control se gestionará el sistema de información público a bordo, que ofrece a los viajeros informaciones como cuál es la siguiente parada, posibles incidencias, tiempos estimados de llegada, etc. y permite también la gestión de la emisión de publicidad, noticias o contenidos de entretenimiento, entre otros.
Sistema de videovigilancia para mayor seguridad
El sistema de videovigilancia embarcada estará también completamente integrado con el SAE y permitirá grabar, transmitir y visualizar imágenes en tiempo real. Cada vehículo estará dotado con varias cámaras, en algunos casos hasta 10, con el objetivo de ofrecer una mayor seguridad a empleados y usuarios, así como disuadir y ayudar a combatir los posibles casos de agresión o de vandalismo sobre cristales o asientos, una práctica que supone un gran coste de mantenimiento para las empresas de transporte público de viajeros. Una de las cámaras, “el ojo del conductor”, enfocará hacia la calle para ver lo mismo que ve el conductor, lo que supondrá una gran ayuda de cara a las auditorías que se producen en caso de accidente, así como para conocer el estado del tráfico o posibles incidentes en tiempo real desde el centro de control.
Además, 18 vehículos incorporarán un sistema de conteo de viajeros que registra el número de pasajeros tanto en subida como en bajada, lo que permite conocer la ocupación para evitar sobrepasar el aforo máximo permitido, solicitar vehículos de refuerzo en picos de demanda, realizar estudios de movilidad, etc. El proyecto también incluye un sistema de apoyo a la navegación para el conductor que indica por voz las órdenes transmitidas desde el centro de control para regular el servicio.
Toda la tecnología implantada por Indra está especialmente diseñada para soportar condiciones extremas de temperatura, ya que en Wroclaw se pueden alcanzar temperaturas inferiores a los 15 grados bajo cero en invierno.