La pieza clave de la tecnología RFID es un diminuto chip de sólo un centímetro. El microchip se incorpora al neumático en la cadena de montaje y se programa con un código único que identifica al neumático, permitiendo la lectura automática para conocer el tamaño y tipo de neumático así como su código de identificación.
Una revolución en el mundo de la competición
Tony Duffy, Director de Operaciones de Dunlop Motorsport Europe, declaró: "Este proyecto ha supuesto todo un reto y los conocimientos y experiencia técnicos de la BTCC han sido de gran ayuda a la hora de perfeccionar el sistema. En estos momentos hemos logrado todos los neumáticos estén bajo control y estamos en condiciones de proporcionar a la BTCC un registro preciso al cien por cien de la actividad de cada neumático."
Goodyear Dunlop como compañía tiene previsto ampliar el uso de RFID a neumáticos de otros tipos y tamaños en un futuro próximo, así como a otros campeonatos dentro del mundo de la competición. Actualmente, los neumáticos RFID se fabrican en la sede de Dunlop Motorsport en Birmingham, en el Reino Unido y en las fábricas de Goodyear Dunlop en Luxemburgo y Wittlich en Alemania. Aunque los chips RFID actuales sólo llevan información identificativa, es posible que en el futuro sean dinámicos, de modo que se puedan monitorizar diversos parámetros en tiempo real.