En 2011, la producción a gran escala de baterías de ion-litio entró en funcionamiento en varios países de todo el mundo, para apoyar e impulsar la demanda de la conducción eléctrica, en muchos países respaldada con subvenciones y beneficios fiscales.
"Además de los vehículos que salieron a la venta en 2011, los anuncios de los principales fabricantes dejan claro que este segmento tendrá una competencia mucho mayor en los próximos dos años", dice el analista de AB, David Alexander. "Además, algunos vehículos híbridos existentes estarán equipados con baterías más grandes para mejorar su rango sólo-eléctrico".
La continua demanda de vehículos más limpios y eficientes, dirigida por gobiernos que tratan de lograr sus objetivos de reducir las emisiones, hace suponer que los incentivos financieros se mantendrán durante mucho tiempo. La infraestructura de recarga también se está desarrollando rápidamente en algunas zonas urbanas.
"La busqueda de autonomía está disminuyendo y la aceptación de los consumidores está creciendo, pero el principal obstáculo para los posibles compradores de un vehículo eléctrico sigue siendo el alto precio", dice el director del grupo, Dominique Bonte. "Y mientras se espera una caída significativa de los costes de la electrónica y los motores eléctricos, sin embargo no hay grandes espectativas de recortes en los precios del componente más caro, el paquete de baterías."
El nuevo estudio de investigación de AB "componentes de vehículos eléctricos e híbridos eléctricos" ofrece un análisis de las tendencias del mercado mundial, el costo y las evaluaciones técnicas de los principales sub-sistemas de PHEV. El informe forma parte de Automotive ABI Research, Servicio de Investigación Tecnológica.