El sector del automóvil no pide al Gobierno ayudas, sino medidas estructurales que logren incentivar la demanda. Así lo ha manifestado el director general de Automóviles Citroën España, Alfredo Vila, en el Foro de Automoción organizado por la consultora Pricewaterhouse Coopers, en el que se ha presentado el informe “El futuro de la distribución del automóvil se decide hoy”. Vila explicó que “las ayudas hacen avanzar la demanda de manera artificial, con todo lo que ello conlleva a la hora de fijar bien el valor de los vehículos”. Sin embargo, el directivo de Citroën sí considera positivas medidas fiscales que se verían compensadas por los ingresos tributarios obtenidos de la demanda adicional. “Hay que tener en cuenta” manifestó, “datos como que, por cada 100.000 vehículos adicionales de demanda, se recaudan entre 320 y 350 millones de euros de impuestos, que suponen ingresos muy considerables para las distintas Administraciones”.
En el marco de este foro, en el que se ha reflexionado sobre los puntos más destacados en los que debería incidir el sector para afrontar el futuro, el director general de Citroën España ha manifestado la importancia de tener un nuevo enfoque sobre el cliente, “es necesario hacerle fan, comunicarle el valor añadido de nuestros productos”. Asimismo, en un mercado que el directivo de Citroën pronosticó que nunca volverá a alcanzar 1.600.000 turismos y que será inferior al millón en los próximos dos años, Vila declaró que es necesario hacer compatible la capilaridad de la marca en la geografía española, con una zona de responsabilidad del concesionario que le dé una masa crítica de negocio.
Como muestra el informe presentado en este foro, el sector del automóvil tiene un peso muy importante en España, ya que proporciona el 8,7% del empleo en nuestro país y supone el 6,2% del PIB. Además, Vila manifestó su creencia de que “no hay ninguna industria en nuestro país que genere valor en tantos sectores económicos”. La fabricación de componentes, el transporte, el diseño, la investigación, y la confección, fueron algunos de los que mencionó. Sin embargo, Vila manifestó su descontento porque, en numerosos medios, solo se habla del automóvil cuando es protagonista de una mala noticia. “No estamos consiguiendo transmitir las fuertes inversiones que, incluso ahora, se están realizando en avances que permitirán el progreso de una industria que es una importante fuente de riqueza y de empleo para España”.
En este sentido citó, entre otras, inversiones en seguridad, eficiencia energética y medioambiente, lamentándose de que no exista una coherencia entre las exigencias de la UE en este campo y las de la Administración española con respecto a las emisiones de los coches que circulan en nuestro país. “Es incomprensible,” –concluyó- “que sigan circulando vehículos que cumplen la normativa Euro 3”.