El Ministerio de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino pretende un plan que busca impedir el acceso de los coches más contaminantes en las zonas urbanas con niveles de polución por encima de lo permitido por la UE, según se recoge en el Plan Nacional de Mejora de la Calidad del Aire, en fase de información pública.
El Gobierno pretende así hacer frente a la polución de algunas áreas urbanas, cuyos niveles rebasan los topes máximos comunitarios y que han supuesto un expediente de la UE contra España. La principal novedad del plan es la propuesta para delimitar zonas urbanas de atmósfera protegida (ZUAP), áreas en las que se deberá actuar prioritariamente para reducir la contaminación del tráfico, entre otras fuentes contaminantes.
La medida prevé la gestión por parte del Ministerio de Industria de un etiquetado de los vehículos, tanto nuevos como ya en circulación, que los diferencie en función de su nivel de contaminación.
Se plantean cinco categorías de vehículos en función de las emisiones de óxidos de nitrógeno (NOx) y partículas en suspensión (PM10), los dos principales contaminantes del tráfico. El adhesivo rojo (número 1) marcaría los coches diésel fabricados con las normas Euro O, Euro 1 y Euro 2 y los coches de gasolina anteriores a 1992, carentes de catalizador.
A continuación, estarían los marcados con adhesivos naranja (2), amarillo (3) y verde (4), que identificarían los fabricados bajo normas progresivamente más recientes; y, finalmente, estaría el adhesivo verde (4 plus): los vehículos híbridos, de gas y eléctricos.
El plan establece a partir de 2012, además, la prohibición de circular por las ZUAP a los vehículos etiquetados con adhesivos rojo, pudiendo ampliarse la medida también a los vehículos con adhesivo naranja o amarillo.
El aparcamiento en las zonas protegidas daría prioridad a los residentes y ofrecería espacios gratuitos o de bajo coste a los vehículos con adhesivo verde 4 Plus. También se daría preferencia a los vehículos de reparto con adhesivo verde, mientras que el transporte público en estas zonas sólo podría hacerse con vehículos propulsados por GLP, gas (con catalizador para reducir los NOx) o híbridos, entre otros vehículos ecológicos.
Asimismo, el plan propone una modificación del impuesto de circulación para bonificar los coches que tengan menos emisiones (según la antigüedad, la cilindrada y el tipo de combustible). También se plantea una revisión del impuesto sobre hidrocarburos para que deje de primarse a los diésel, dadas las emisiones de NOx y partículas que generan. También se promueve una revisión de la ITV para detectar los fallos y averías que incrementan las emisiones.
Otra de las novedades es que el plan da algunas herramientas para que las administraciones puedan apoyar la adecuación de las flotas de servicio público a criterios medioambientales. Así, se propone hacer uso del Eco-test para seleccionar los vehículos más eficientes.
El plan incorpora otras medidas ya previstas en otras actuaciones, como el fomento del transporte público, del uso de la bicicleta o la implantación de carriles para vehículos con alta ocupación.
El documento, hecho público antes de consensuarlo con las autonomías, prevé también la limitación de la velocidad máxima en la periferia de las ciudades a 80 km/h en las horas de mayor tráfico, y cursos de conducción eficiente también a impartirse desde las academias de conducir.