"La Ley de Movilidad va a ser fundamental para alcanzar el objetivo de que el 40 por 100 de los desplazamientos de las áreas metropolitanas en días laborables se realicen en transporte público en el año 2020", ha manifestado el conseller de Infraestructuras y Transporte, Mario Flores, tras la aprobación del texto legislativo por parte de las Cortes Valencianas.
La Ley de Movilidad que integra la normativa referente a los distintos modos de transporte para favorecer el uso de los sistemas públicos y de los desplazamientos peatonal y ciclista frente al coche particular. Flores ha manifestado su satisfacción por la aprobación de la Ley y ha asegurado que va a favorecer la oferta de "un transporte público eficiente y sostenible, que signifique una verdadera alternativa al vehículo privado".
La nueva norma integra la legislación referente a transporte de viajeros, ferrocarriles y tranvías, taxis, logística y planificación de la movilidad. Con este texto, la Comunidad se convierte en la primera que adapta el reglamento 1370/2007 de la Unión Europea sobre los servicios de transporte por ferrocarril y carretera y avanza en la asunción de competencias previstas en la reforma del Estatuto de Autonomía de 2006.
La normativa se adelanta al escenario previsto en materia de transporte en 2020, para cuando se prevén 2.500 millones de desplazamientos anuales en la Comunidad. El objetivo del Consell es que el 40 por 100 de los desplazamientos se realicen en transporte público en esta fecha. Para alcanzar este objetivo, el conseller ha destacado la importancia de este texto y de la "fuerte inversión en transporte público que está efectuando la Generalitat para dotar a las tres áreas metropolitanas de sistemas de transporte público avanzados, eficaces y sostenibles".
Parking para bicis en los edificios
En materia urbanística, establece que los nuevos desarrollos urbanísticos, comerciales, etc., deberán contar con planes de movilidad, de forma que se evite la implantación de urbanizaciones cautivas del transporte privado. Los nuevos edificios deberán tener espacios para aparcar bicicletas. Estos vehículos, así como los peatones, recibirán atención preferente en vías y plazas urbanas. Se recoge la creación de itinerarios específicos para bicis y la adecuada compatibilidad con otros medios de transporte.
La nueva Ley impulsará la redacción y aplicación de planes de movilidad como instrumento para concretar todas estas medidas. Los municipios de más de 20.000 habitantes deberán tenerlo en un plazo de cuatro años, y los centros comerciales, de estudio o de trabajo deberán también desarrollar trabajos de este tipo.
El texto incorpora el concepto de "pasillo de infraestructuras" como corredor que aglutine los diferentes sistemas de transporte y minimizar así el impacto sobre el entorno. Recoge también medidas para mejorar la calidad del servicio del taxi, como su organización comarcal o autonómica, la regulación de los centros de llamada o la antigüedad máxima de ocho años para los vehículos con carácter general.