El pleno de Tarragona ha aprobado este lunes, por unanimidad, el Plan de Ordenación Urbana Municipal (POUM), que fijará el crecimiento de la ciudad durante los próximos 25 años con una previsión de población máxima de 180.000 habitantes.
El objetivo del plan incluye el desarrollo urbanístico sostenible del municipio, así como la cohesión social, mediante la interconexión entre barrios y con el centro, la ampliación de zonas verdes y la mejora de la movilidad sostenible.
A esta aprobación por parte del pleno municipal deberá seguir la aprobación por parte de la comisión territorial de Urbanismo de la Generalitat de Cataluña y la firma del consejero de Política Territorial.